Elecciones 2024
Elecciones 2024

Hace seis meses, en vísperas de las elecciones intermedias del sexenio lopezobradorista, en la cúpula de la Cuarta Transformación con prístina claridad formulaban cálculos sobre el corto y el mediano plazo. En lo inmediato, Morena y sus aliados apenas concitaban 36% de las preferencias electorales, lo que impediría cumplir con las instrucciones superiores, de repetir la mayoría absoluta en la Cámara baja.

Si volviera a estar en la boleta electoral, el Ejecutivo federal perdería. Y en la carrera por la candidatura presidencial del 2024, Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard estaban empatados, aunque uno de cada cinco encuestados se oponía a que ellos o cualquier otro representante morenista fuera el sucesor de AMLO.

La medición sobre los dirigentes políticos y el clima electoral que retrataba ese escenario ominoso no era cualquier encuesta. A pesar de ser telefónica —híbrida, entre aparatos fijos y celulares— contaba con una muestra robusta, de 2,000 entrevistas realizadas en las 32 entidades federativas, cuyo diseño y conducción recayó en Gisela Brito, del área de Opinión Pública del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica.

Ese think tank progresista generó entonces su segundo informe sobre la situación política y social de México. El primero —apareció en junio del 2020— fue tema de mención en la conferencia matutina de Palacio Nacional. Adicionalmente, publica un reporte de coyuntura.

La imagen del presidente capturada por esa encuesta coincidía con el registro de la mayoría de las encuestadoras locales. También, otras opiniones sobre el desempeño del gobernante. Y la identificación de una franja de ciudadanos —equivalente a un tercio— opuestos a la Cuarta Transformación.

La polarización es el signo de estos tiempos. Del origen de la riqueza, tres cuartas partes de los entrevistados asume que proviene de privilegios anteriores y de la corrupción. En esas mismas proporciones, reconocen que las ayudas sociales son necesarias para que la población de escasos recursos accede a una vida digna.

Basado en Buenos Aires, el CELAG es dirigido por los académicos españoles Sergio Martín y Alfredo Serrano, así como el ecuatoriano Mauro Alejandro Andino, exfuncionario del gobierno de Rafael Correa.

Esa institución tiene al expresidente sudamericano y al exvicepresidente español, Pablo Iglesias, entre sus consejeros. También cumplen esas funciones el subsecretario de relaciones exteriores, Maximiliano Reyes y el académico español Juan Carlos Monedero, ideólogo de Podemos y directivo de la empresa Neurona Consulting, que conduce la estrategia comunicacional de Morena en México.

Acababa el primer cuatrimestre del 2021 cuando se difundió ese reporte. Allí aparecieron algunos atisbos de la polémica en curso sobre la iniciativa presentada por el Ejecutivo federal para reformar el sector eléctrico. Sólo 25% de los entrevistados se manifestó contra la propuesta de que el Estado mexicano administre los recursos naturales de la Nación y 40% calificó errada la idea de que la reforma eléctrica promovida por AMLO es beneficiosa para el país.

Su proyección sobre la sucesión presidencial no tiene desperdicio. Sobre el escenario político-electoral de México, su colaboradora reportó que el canciller Ebrard y la jefa de Gobierno de la Ciudad de México estaban posicionados como los potenciales “sucesores” del actual presidente. “En el espectro opositor no hay un liderazgo claro”, concluyó, “al ser consultados sobre quién debería encabezar la oposición al actual gobierno un tercio de la ciudadanía responde ‘ninguno’, y Ricardo Anaya obtiene 23% de apoyos”.

El contrapunto entre Ebrard y Sheinbaum explicaría lo sucedido después del 6 de junio. El titular de Relaciones Exteriores superaba a la jefa de Gobierno en todos los atributos —lealtad a Ejecutivo, manejo de la economía del país, representación de México en el exterior y capacidad para enfrentar al narcotráfico y la corrupción— entre aquellos que manifestaron que votarían por AMLO.

Efectos secundarios
PARITARIOS. La alcaldesa de León, Guanajuato, Alejandra Gutiérrez Campos, asumió la presidencia de la Asociación Nacional de Alcaldes, en la que confluyen funcionarios municipales postulados por el PAN. Y por encomienda del líder nacional de esa formación política, Marko Cortés, exigirá a la Cámara de Diputados que los fondos estatales y locales abrogados por la Cuarta Transformación sean restituidos íntegramente. Gutiérrez es la primera mujer en tener esa responsabilidad y el nuevo comité ejecutivo de la ANAC tendrá Luis Nava Guerrero, alcalde de Querétaro, como vicepresidente secretario y a Santiago Taboada Cortina, alcalde de Benito Juárez en la Ciudad de México, como vicepresidente tesorero.