Formado como servidor público al lado de Francisco Labastida, efímero secretario de Gobernación en el sexenio zedillista, Esteban Moctezuma Barragán interrumpió su imperturbable y criticada carrera en el servicio público en el 2000 con el triunfo de Vicente Fox
Formado como servidor público al lado de Francisco Labastida, efímero secretario de Gobernación en el sexenio zedillista, Esteban Moctezuma Barragán interrumpió su imperturbable y criticada carrera en el servicio público en el 2000 con el triunfo de Vicente Fox. Durante tres lustros estuvo al lado de Ricardo Salinas Pliego y se hubiera quedado en Fundación Azteca más tiempo, si hubiera rechazado la invitación de Andrés Manuel López Obrador para sumarse a la Cuarta Transformación, hace tres años.
Por sus nexos con el mandamás de la televisora del Ajusco y su buen trato con Elba Esther Gordillo, los jerarcas de Morena nunca objetaron su cercanía al líder tabasqueño, a pesar de antiguos agravios por su pasado priista. Acabo no sabían que Pablo —hermano mayor del próximo representante del gobierno mexicano ante la Casa Blanca y militante de la izquierda social— fue compañero de AMLO en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM, donde Enrique González Pedrero, Víctor Flores Olea y José Antonio Álvarez Lima amalgamaron a una generación brillante de profesores y alumnos.
Nietos del general Juan G. Barragán, Pablo, Gonzalo, Javier y Esteban nunca olvidaron sus raíces potosinas. El primer secretario de Educación Pública del gobierno lopezobradorista estaba perfectamente consciente de que negarse a una petición del primer mandatario no está permitido para un verdadero servidor público. Y por lo mismo, llegado el momento de afrontar el 2021, optó por incursionar en el servicio exterior.
Moctezuma Barragán agradeció al Ejecutivo federal lo que calificó como “el mayor honor de mi vida”: haber encabezado a los maestros durante dos años.
“Vamos a tener en Washington DC a un buen representante; una persona con principios, preparada, nacionalista, conocedor de los principios de la política exterior y sobre todo, de los principios de no intervención y de autodeterminación de los pueblos, y de cooperación para el desarrollo”, dijo este lunes el Ejecutivo federal luego de despedir a Moctezuma Barragán en la mañanera.
Moctezuma Barragán se va triste de la SEP, imposibilitado de cumplir su anhelo de estar en la boleta electoral en el 2024, pero satisfecho de haber contribuido a la pacificación del magisterio mexicano. El nombramiento de la excandidata de Morena a la gubernatura del Estado de México, Delfina Gómez Álvarez, como titular de la SEP, sería la evidencia máxima de la revaloración de los docentes por parte del gobierno mexicano.
Egresada de la UPN, con un posgrado en el Tec de Monterrey, Gómez Álvarez no es la primera maestra en ocupar el escritorio de José Vasconcelos, José Ángel Ceniceros (1952-1958) y José Ángel Pescador Osuna, quien ocupó la vacante que dejó Ernesto Zedillo en 1994; fueron normalistas.
Legitimada para estar al frente de la SEP por sus dos décadas de servicio docente —fue directora de la primaria con mayor matrícula de su natal Texcoco— Delfina no tiene una afiliación al SNTE, aunque también conoce sobre los aspectos sindicales por experiencia propia: cuando era subdirectora de su centro educativo también fungió como secretaria de relaciones en la delegación 34 del Sindicato de Maestros al Servicio del Estado de México.
En el año 2000, la profesora Trinidad Franco Arpero asumió el liderazgo de los maestros mexiquenses y Gómez Álvarez fue electa secretaria general de la delegación 04 y dos años después, brevemente sirvió en la Secretaría de Educación Pública local, como directora de área, en el último tramo del gobierno de Arturo Montiel.
Delfina llega con legitimidad y honradez. Y deberá aprovechar la “gran oportunidad” que la Cuarta Transformación le ha dado —a ella, no al magisterio organizado— para concluir con la tarea iniciada por su antecesor: limpiar la SEP.
“Si bien en estos dos años se aprecian muchos logros tanto legislativos como pedagógicos, así como una administración del gasto responsable, aún queda mucho por atender”, insistió.
Al rezago histórico, se imponen nuevos retos como efecto de la pandemia. Las clases presenciales en este ciclo escolar no es viable por las condiciones sanitarias, sin duda, pero sobre todo por las resistencias de las organizaciones sindicales. La renovación del liderazgo en el SNTE también es un pendiente que no podrá cumplirse en el corto plazo.
Efectos secundarios
DISCRECIONALES. De acuerdo a Mexicanos Contra la Corrupción e Impunidad, entre diciembre del 2018 y octubre del 2020, Petróleos Mexicanos realizó 32 transacciones con 26 empresas, muchas bajo procesos de licitación bajo invitación restringida. Entre éstas, hay firmas de reciente creación y otras que carecen de antecedentes en una industria de alta especialización. Entre ese cúmulo de transacciones se identificó a Arias Soluciones Integrales y Servicios Integrales, considerada por el SAT como empresa fantasma. Y hay otra decena de empresas que fueron sancionadas o inhabilitadas que fueron contratadas para 23 transacciones más.
ILIMITADOS. La austeridad republicana resulta incómoda y los contratos marco elaborados por las secretarías de Hacienda y Función Pública, simplemente son letra muerta a la hora de contratar los servicios de limpieza en diversas dependencias de la administración pública federal. Ya pasó en Palacio Nacional, en el Palacio de Covián y ahora esto se extenderá a las múltiples sedes de Segalmex, luego de que Aseo Privado Institucional recibiera el contrato, no obstante que cotizó costos mensuales por encima de los 7,715 pesos asentados como precio máximo de referencia para cada trabajador.
Twitter: @aguirre_alberto