A estas alturas, el presidente López Obrador es más de arrebatos que de sosiegos. Se va con la primera versión, sin comprobar, reacciona y luego virigua, en lo que arrastra a sus feligreses que lo citan con poca gracia y menor efectividad
En lugar de comprar la fábrica de Vitacilina, que compren la de medicinas para los niños con cáncer.
Florestán.
A estas alturas, el presidente López Obrador es más de arrebatos que de sosiegos.
Se va con la primera versión, sin comprobar, reacciona y luego virigua, en lo que arrastra a sus feligreses que lo citan con poca gracia y menor efectividad.
Eso le sucede con preocupante frecuencia en las mañaneras, como ayer cuando, ignorando, y eso que los presidentes sabían todo, que Cuauhtémoc Cárdenas no había asistido al lanzamiento de la nueva plataforma Colectivo por México, el lunes, lo declaró su adversario político, con todo lo que eso implica para él que hace de ese calificativo, sinónimo de enemigo.
Y estamos hablando de un hombre sin el que López Obrador no existiría, a cuya luz creció y siempre dijo venerar hasta ayer por la mañana, al responder una pregunta. No pidió confirmación, no preguntó si era verdad, no le constaba, no le importaba: primero dispara (o mata) y luego averigua, sentencia de Pancho Villa que retrataba en parte su personalidad y el momento que vivía el país.
-¿Considera a Cárdenas adversario por formar parte de ese grupo? –le preguntó la reportera.
-En política sí –disparó sin más. Sí, si él asume una postura de ese tipo. (…) Pero estamos viviendo un momento de definiciones y esta ancheta está muy angosta, no hay para dónde hacerse. Es estar con el pueblo o con la oligarquía, no hay más. No hay justo medio, sentenció.
Y enseguida vino el eco cotidiano de Claudia Sheinbaum: Yo coincido (con el presidente, todos los días coincide). Hay momentos de definición política y uno decide donde quiere estar y en esta definición, con todo respeto al ingeniero, pues él toma esa decisión de donde quiere estar.
Al mediodía, Cuauhtémoc Cárdenas se deslindó de esa plataforma y dejó al presidente, y a Sheinbaum viriguando, después de haber disparado.
Es la revolución de las conciencias en los tiempos estelares de la 4-T: primero dispara y luego averigua.
RETALES
- REVÉS.- Ayer el pleno le dio otro revés con la llamada Ley Nahle, y ocho de los once ministros votaron en su contra, a favor solo tres, de ellos dos de los suyos: el ponente, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Juan Luis González Alcántara y Yasmín Esquivel. Ni siquiera Loretta Ortiz. Mañana, más;
- IRRUPCIÓN.- Alejandro Moreno irrumpió sin estar invitado en la plenaria de los senadores del PRI y Miguel Osorio la suspendió y reiteró su rechazo al presidente del PRI y a su proyecto de seguir al frente del partido y que se irá en agosto; y
- RUTA.- Aeroméxico anunció en plena degradación de la autoridad aeronáutica, una nueva ruta AIFA-Houston. El secretario Jorge Nuño dijo que consiguió la autorización de los departamentos de Transporte y Estado y de la FAA para inaugurar esa ruta única. Y que recuperará la categoría Uno en abril a más tardar, tras casi dos años de rebaja.
Nos vemos mañana, pero en privado.