Al niño de 4 años le cayó un espejo de más de 100 kilos encima mientras visitaba una de las tiendas Hugo Boss en Oxford
La firma de ropa Hugo Boss tendrá que pagar 1.2 millones de libras (casi 30 millones 560 mil pesos) a la familia de un menor quien murió dentro de la tienda cuando un espejo del probador le cayó encima, provocando graves daños cerebrales.
En 2013, Austen Harrison de 4 años se encontraba en la tienda localizada en Bicester Village con sus padres, Simon e Irina Harrison, cuando un espejo de 2.1 metros con marco de acero y que no estaba asegurado a la pared, aplastó al menor.
Aunque fue ingresado en emergencias, debido al peso de 144 kilogramos del cristal, este le provocó daño cerebral y cuatro días después murió.
Sin embargo el pasado miércoles, Hugo Boss dio a conocer un comunicado donde pidió disculpas por lo ocurrido, aceptando que fue un acto de negligencia por parte de la firma alemana.
Por lo que tras el fallo de la Corte de la Corona de Oxford, la compañía tendrá que pagar a los padres 1.2 millones de libras.
Por su parte, la madre del menor, quien se divorció de Simon Harrison, aseguró que aún “no puedo entender porqué un espejo de ese tamaño no fue sujetado a la pared. Sería como tratar de equilibrar una pieza de dominó”.
En tanto que el juez Peter Ross manifestó que fue “un milagro” que el espejo no se hubiera caído antes.
Con información de The Guardian