Elecciones 2024
Elecciones 2024

México puede hacerle daño a Estados Unidos, pero es claro que el país vecino no se quedará quieto y puede que tire a matar.

Los diputados no guardaron el secreto. Luis Videgaray les contó que México prepara su Ley del Talión para responder a Estados Unidos: “Si nos ponen un impuesto a las exportaciones mexicanas, les vamos a poner uno a las de ellos, pero lo vamos a hacer mejor que ellos porque vamos a escoger cuáles les duelen”.

De la reunión de Videgaray con la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, uno puede pensar muchas cosas: a) el plan de Videgaray no era un secreto para ser guardado, porque nadie cuenta un secreto a un grupo tan grande; b) el canciller se sigue teniendo una enorme confianza, prueba de ello es su afirmación de que México hará mejor que Estados Unidos el “trabajo” de imponer impuestos; c) Videgaray no le avisó al secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, de su plan de respuesta comercial a Estados Unidos porque, si lo hubiera hecho, Guajardo no hubiera reaccionado del modo en que lo hizo, en el foro de LatinFinance, “yo creo que la responsabilidad de las relaciones comerciales recae en el secretario de Economía”, y d) el plan expuesto ante los diputados no es el plan verdadero, sino un bluff.

Hay dónde golpear. El sector agrícola de Estados Unidos está en alerta máxima porque México es el mayor cliente de sus productores de granos, de acuerdo con las cifras del US Grains Council. En el 2016, las compras mexicanas a Estados Unidos fueron de 2,500 millones de dólares, 40% mayores que las realizadas por el segundo cliente, Japón. Tan sólo en el caso del maíz, México compró 12.9 millones de toneladas de maíz amarillo, con un valor de 2,237 millones de dólares.

Si México hace efectiva su amenaza de cambiar la proveeduría de granos de Estados Unidos a Brasil y Argentina, le pegará con fuerza a un sector que atraviesa por un momento muy difícil. El ingreso promedio por granja en Estados Unidos ha caído de 130,000 dólares anuales en el 2012 a 81,000 dólares en el 2016. La deuda total del sector agrícola es ahora superior a los 400,000 millones de dólares; era aproximada a 300,000 millones de dólares en el 2012.

Para hacerlo, México deberá resolver problemas de logística. Se trata de traer cargamentos de maíz en barco para distribuir entre pequeñas y medianas empresas, que son los mayores consumidores de maíz. Deberá también asumir costos más altos. La tonelada de Estados Unidos vale 204 dólares frente a 215 en Argentina o Brasil. El costo de transporte lleva el maíz sudamericano hasta los 238 dólares por tonelada, puesto en México.

Los costos logísticos parecen poca cosa, comparado con el costo potencial de hacer enojar a Donald Trump. El mandatario estadounidense es temperamental, detesta perder y puede mostrar su peor faceta, si siente que alguien le ganó la partida. Así lo percibe Ron Klain, quien es una de las personas que más ha estudiado el comportamiento del presidente de Estados Unidos. Klain fue jefe de staff de los vicepresidentes Gore y Biden y estratega de la campaña de Hillary Clinton.

De verdad, ¿el Gobierno mexicano está dispuesto a desquitarse de Estados Unidos cobrándose ojo por ojo y granos por carros? Por el momento, parece una ocurrencia más que un plan definido al detalle. Es claro que México puede hacer daño a Estados Unidos, pero también es evidente que el vecino no se quedará quieto si se siente herido y puede tirar a matar. ¿La Ley del Talión va en serio o es un bluff?