La duda es sobre la efectividad, la influencia de su estrategia en lo decisión unipersonalísima del presidente López Obrador: su sucesor
A diferencia de la política, mientras más vieja es la guerra, más jóvenes son los soldados.
Florestán.
El reporte que Marcelo Ebrard recibió el sábado del evento que el gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes, le organizó a Claudia Sheinbaum con más de cuarenta mil asistentes, acarreados con recursos públicos, fue la gota que le derramó el vaso y tomó una decisión: renunciar ya a la secretaría de Relaciones Exteriores para dedicarse de lleno a su candidatura presidencial siempre por Morena.
Y pidió una cita con el presidente López Obrador que lo recibió en su palacio el lunes ya tarde, antes de irse a la cena de la victoria en el restaurante El Mayor, donde ya estaban sus 22 gobernadores y los cuatro presidenciables para, formalmente, celebrar la victoria de Delfina Gómez en el estado de México.
El presidente lo recibió en su palaciego despacho y el canciller le planteó antecedentes, circunstancias y decisión de renunciar a la cancillería ante la falta de piso parejo, refiriéndose a ese mitin de la jefa de Gobierno en Puebla, para irse de campaña, lo que López Obrador escuchó con detalle y le dijo que su prioridad era el juego limpio y, según un cercano, lo sintió auténtico. En la conversación le aceptó la dimisión, le ratificó la invitación a la cena, donde sí habló de las renuncias, y quedaron en que al día siguiente, ayer martes, hiciera el anuncio.
Ebrard había adelantado hace doce días, que este lunes 5, tras las elecciones, haría un gran [CM1] anuncio sobre el método de las encuestas lo que por lo arriba detallado, el fin de semana lo pasó para el martes, pero ya no para hablar de los métodos demoscópicos, sino de la avalancha de su renuncia para irse, ahora sí de tiempo completo, a la campaña para ganar la encuesta de Morena.
Con esta decisión y este anuncio, da un salto a futuro, sin quemar todas sus naves pero sí abriendo una opción que hoy no tiene ninguno de sus contrincantes: el ser libre, al menos hasta que Morena los obligue a irse.
La duda es sobre la efectividad, la influencia de su estrategia en lo decisión unipersonalísima del presidente López Obrador: su sucesor.
RETALES
1. DISTANCIA.- Cuando Ebrard planteó este tema, la renuncia ya de todos los precandidatos fue en una entrevista en Radio Fórmula, el pasado 5 de diciembre lo que me reiteró este 22 de marzo, y fue bateado por todos. Ahora que el domingo lo establezca su consejo nacional, veremos;
2. RESPUESTA.- A todo eso, Adán Augusto López Hernández reiteró: Hace muchos años, un paisano me enseñó que en política se debe construir el equilibrio entre la razón y la pasión. Serenidad y paciencia. Los tiempos del Señor son perfectos; y
3. CLAUDIA.- En el caso de la Jefa de Gobierno, de dejar el cargo, el sucesor será en automático Martí Batres, quien quiere sucederla en el cargo, mientras el congreso capitalino elige un sucesor o sucesora. ¿Pero si no acepta para jugarla en 2024?
Nos vemos mañana, pero en privado.