Veremos cómo corren los casi 18 meses que le quedan de gobierno, los más difíciles para un presidente de la República y contra qué molinos se lanza
Puede seguir repitiendo lo mismo, pero ya no es igual.
Florestán.
El presidente Andrés Manuel López Obrador, en su ejercicio del gobierno de un solo hombre, concentrador de poder y poderes, tiene una aversión a todos los organismos e instituciones que no están bajo su control a los que ha declarado, y mantiene, una guerra a muerte.
Empezamos por la Suprema Corte de Justicia de la Nación en la que, según confesión propia, al no tener los cuatro ministros claves, que él propuso, para impedir la mayoría calificada del pleno, que son ocho, y al relevo, que trató de evitar con una reforma inconstitucional para extender la presidencia de Arturo Zaldívar, ha reforzado su ofensiva que ha personalizado en su presidenta, Norma Lucía Piña.
Su otro blanco es el INE al que acusa de todos sus males pasados, presentes y futuros no, porque esos serán a su cuenta, tras su reforma electoral, vigente desde ayer, que le abre el espacio para lo suyo: operar electoralmente en el proceso federal de 2024, esto si la Corte no la declara inconstitucional para lo que tiene hasta el 30 de mayo a menos que, como en su Ley Eléctrica, logre los votos de cuatros ministros, de los que ya tiene dos y medio: Loretta Ortiz, Yasmín Esquivel y Arturo Zaldívar, con cuya decisión definirá su paso por ese tribunal. Y de darle esa mitad en duda, le faltaría otro ministro
En esa línea, ha enfilado contra la UNAM, a la que acusó de derechizarse, el INAI, al que apenas el miércoles, y por gestión de Ricardo Monreal, aprobó dos consejeros que evitaron su muerte temporal, la Comisión Federal de Competencia, el Instituto Federal de Telecomunicaciones, la Comisión Reguladora de Energía, que ya coptó, y el Instituto Nacional de Evaluación Educativa, que ya desapareció.
Veremos cómo corren los casi 18 meses que le quedan de gobierno, los más difíciles para un presidente de la República y contra qué molinos se lanza.
RETALES
1. REFORMA.- La reforma de López Obrador a la ley electoral, modifica la que hizo como opositor: prohibir la promoción electoral desde el gobierno. Y ahora que es gobierno, quiere hacerla. Hasta ahora, el ministro Alberto Pérez Dayán ha recibido seis acciones de inconstitucionalidad, desechó una, y 161 controversias contra su reforma;
2. AVIÓN.- Al presidente le organizaron una ceremonia en el AIFA para recibir el primer avión de carga, de DHL, con templete, discursos y Claudia Sheinbaum. Pero le engañaron. El avión había llegado la víspera y salió a la pista vacía de un hangar, no de Cincinnati, como le habían dicho. Y como si nada; y
3. PRIMOS.- Alejandro Armenta, presidente del Senado, me dijo ayer que su principal contrincante al gobierno de Puebla por Morena, Ignacio Mier, presidente de la Junta de Coordinación Política de los diputados, es su primo segundo. Sí, su apellido materno es Mier: Alejandro Armenta Mier.
Nos vemos el martes, pero en privado.