ÚLTIMA HORA Medios iraníes reportan que misiles aparentemente Israelíes alcanzaron un sector de ese país
Elecciones 2024
Elecciones 2024

En la más reciente edición de “Sin fronteras” analizamos cómo el mercado pasó, en un par de meses, de asignar una probabilidad de recesión cercana a 40% para la economía estadounidense a apostar por un escenario de desaceleración muy suave y ordenado.

Como detallamos el martes, los factores principales detrás del cambio de percepción son el relajamiento de las condiciones monetarias y la distensión de las disputas comerciales.

Aunque lo que sigue es una opinión fuera de consenso, hay algunos observadores que piensan que el mercado se está equivocando al subestimar la probabilidad de recesión.

Dentro de estos especialistas se encuentra el economista Lakshman Achuthan, cofundador del Economic Cycle Research Institute (ECRI, por su sigla en inglés). El ECRI es una institución independiente y apartidista —fundada en Nueva York en 1996 para preservar y avanzar en el análisis del ciclo de negocios—, establecida por Achuthan y Geoffrey Moore.

Moore a su vez fue parte del National Bureau of Economic Research (NBER, por su sigla en inglés). El NBER es una institución privada sin fines de lucro enfocada en el estudio del ciclo de negocios en Estados Unidos que tradicionalmente determina las fechas de comienzo y final oficial de una recesión.

Para Lakshman Achuthan, son dos series de datos que apuntan a una desaceleración mayor a la que el mercado está descontando.

El primero de estos es la producción industrial que viene desacelerándose desde el tercer trimestre del 2018 y que está en contracción desde el segundo trimestre de este año.

La recesión en el sector manufacturero, afectado en gran medida por la guerra comercial y la desaceleración del comercio internacional y la actividad económica a nivel global, ha llevado a la producción industrial a su nivel más débil en los últimos tres años.

El segundo factor identificado por Achuthan son las ventas al menudeo que si bien siguen en terreno positivo, han mostrado una tendencia clara de desaceleración a partir de mediados del año. Dado que el consumo representa alrededor de 68% del PIB mientras que el sector manufacturero contribuye con solamente 11%, es claro que la fortaleza del consumo ha contribuido a que la desaceleración en la economía estadounidense sea gradual, ordenada y atenuada.

Para Achuthan, las ventas al menudeo podrían mostrar mayor debilidad en los próximos meses. Aunque los datos de crecimiento del PIB del tercer trimestre se acaban de revisar al alza de 1.9 a 2.1%, el ECRI considera que el crecimiento en el cuarto trimestre del año podría ser mucho menor.

De acuerdo con los modelos de estimación adelantada del crecimiento del PIB de la Fed de Nueva York y la Fed de Atlanta (GDP Nowcast), la economía podría mostrar una tasa de crecimiento de apenas 0.3 a 0.4 por ciento.

Aunque estos números podrían cambiar, parece un hecho que el mercado mantiene una visión bastante optimista del panorama económico en Estados Unidos y podría ser vulnerable a una sorpresa negativa.

Aunque no esperamos una recesión, la desaceleración podría extenderse unos trimestres más antes de que la economía muestre un repunte más claro en la segunda mitad del 2020.