¿Cuál sería la sorpresa de los candidatos aludidos al enterarse de manera indirecta —ni siquiera se tomaron la molestia de avisarles personalmente— que los dirigentes del Partido Verde, Manuel Velasco y Alberto Anaya del Partido del Trabajo, los abandonaban a su suerte?
Nadie que piense de manera juiciosa entiende lo que ha sucedido en el estado de Coahuila; sólo aquellos que tengan el razonamiento de los políticos rastreros, de espíritu oportunista y proclives a la genuflexión frente al gran poder, son capaces de comprender y avalar el comportamiento de las dirigencias de los partidos Verde Ecologista de México y del Trabajo que decidieron de manera unilateral y de última hora retirar su apoyo a loscandidatos a la gubernatura de dicha entidad: Lenin Pérez Rivera y Ricardo Mejía Berdeja, respectivamente.
¿Cuál sería la sorpresa de los candidatos aludidos al enterarse de manera indirecta —ni siquiera se tomaron la molestia de avisarles personalmente— que los dirigentes del Partido Verde, Manuel Velasco y Alberto Anaya del Partido del Trabajo, los abandonaban a su suerte?
En entrevista con Azucena Uresti, el coordinador del Partido Verde en el senado Manuel Velasco Coello, a raíz de que la periodista en su noticiero nocturno le hiciera ver que Lenin Pérez se encontraba molesto porque los dirigentes verdes lo usaron y luego lo abandonaron, respondió: “Él es candidato de su partido local, más bien nosotros nos sumamos, en un acto de generosidad (sic de admiración altruista) a su candidatura. ¿Fueuna herramienta del Partido Verde —preguntó Azucena— para negociar posiciones en el 2024? “Es algo totalmente absurdo porque ni siquiera se han iniciado las pláticas, ni la mesa política rumbo al 2024”. La periodista insistió: ¿Entonces fue para asegurar que no los dejen fuera en la coalición en 2024, como había advertido Mario Delgado? ¿Si flaquearon ante esa advertencia? “Es simplemente no coadyuvar a fragmentar el voto opositor en el estado de Coahuila”. Muchos dicen —persistió la señora Uresti— el Partido Verde traidor, senador. “Nosotros estamos reafirmando nuestra alianza con el presidente Andrés Manuel López Obrador”.
La pregunta surge espontánea: ¿Por qué no reafirmaron su alianza con el presidente en el mes de enero cuando se estaba formando la coalición Juntos Haremos Historia, en torno a Armando Guadiana el designado por las encuestas, aunque éstas hayan constado únicamente de una pregunta y hayan tenido un solo encuestado?
Cinco días antes de la elección, el dirigente nacional del Partido del Trabajo, Alberto Anaya, recordó el refrán que dice: “Más vale tarde que el desprecio presidencial” y retiró el apoyo de su fracción partidaria a Ricardo Mejía Berdeja quien declaró “sólo muerto dejaré esta lucha”. En conferencia de prensa en la capital coahuilense manifestó, según consigna el diario La Jornada, que la decisión del Partido del Trabajo “fue cupular y obedeció a acuerdos centralistas y sucesorios frente al 2024 y descartó que se presionara al PT desde Palacio Nacional. El presidente López Obrador es un demócrata, sostuvo” (en vía de mientras N. del R.).
Sabido es que la ciudadanía no vota por los partidos, sino por las personas y que, según la ley electoral, el hecho de que las instituciones partidistas declinen por el candidato morenista Armando Guadiana, no significa una alianza formal o transferencia de votos. Esto es, los votos que obtengan Pérez Rivera y Mejía Berdeja, serán para ellos, lo que demuestra que la declinación de última hora respondió a un movimiento ambicioso y demencial para no quedarse afuera de lo que se aproxima.
He dejado para el final de mi escrito la delación de que las intenciones del senador Manuel Velasco no fueron como declaró a Azucena Uresti: “Simplemente no coadyuvar a fragmentar el voto opositor en el estado de Coahuila”. Ni reafirmar “nuestra alianza con el presidente Andrés Manuel López Obrador”. Detrás de la acción de Velasco Coello estuvo presente su ambición lograda de ser nombrado por el dirigente morenista, Mario Delgado, como corcholata oficial para el gran premio presidencial del 2024.
Punto final
-Mesero.
– Señor-
-¿Tiene avestruz?
– No señor.
– Pero si ayer había.
– Sí, pero hoy es su día de descanso.