Los legisladores se manifestaron contra la política exterior del presidente López Obrador y su relación con el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega
El Grupo Plural del Senado de la República protestó durante la sesión solemne que se llevó a cabo para recibir al presidente de Chile, Gabriel Boric.
Los legisladores se manifestaron con una manta contra la política exterior del presidente López Obrador y su relación con el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega.
La protesta la realizaron los senadores Germán Martínez Cázares, Gustavo Madero Muñoz y Emilio Álvarez Icaza Longoria quienes extendieron una manta en el Salón de Sesiones, se leía la frase “Boric no protege asesinos en Nicaragua como AMLO”.
La protesta provocó molestia en los senadores de Morena mientras panistas, priistas, perredistas y emecistas quienes les aplaudieron y los apoyaron.
Durante su discurso, el presidente chileno, Gabriel Boric, afirmó que “Latinoamérica no se puede callar” ante las violaciones de derechos humanos en la región y denunció de manera expresa la situación de los “presos políticos” en Nicaragua.
“Nosotros hemos aprendido que cuando se violan los derechos humanos en pueblos de América Latina, uno no puede callar. Siento y palpita en nuestro corazón latinoamericano la solidaridad que México tuvo con nosotros”, sostuvo el presidente chileno, en referencia a la “generosa acogida” a los exiliados chilenos tras el golpe de Estado de 1973.
“No podemos mirar para el lado ante la crisis que está viviendo Haití, no podemos mirar para el lado ante los presos políticos en Nicaragua”, agregó, al reconocer que tanto su país como México “también” habían sufrido casos de violaciones de derechos humanos.
Las declaraciones de Boric, presidente con apenas 36 años y representante de la nueva izquierda latinoamericana, contrastan con el silencio al respecto de la situación de Nicaragua por parte del también izquierdista presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
López Obrador recibió este miércoles en el Palacio Nacional a Boric, en el primer encuentro oficial entre ambos mandatarios.
México no se ha sumado a las denuncias de la mayoría de la comunidad internacional desde diversos organismos internacionales, como la Organización de Estados Americanos (OEA), sobre la represión política en el país centroamericano.
Nicaragua atraviesa una grave crisis política y social desde abril de 2018, que se ha acentuado tras las controvertidas elecciones generales del 7 de noviembre de 2021, en las que el presidente Daniel Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto con su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta, con sus principales contendientes en prisión.
Ortega lleva 15 años y 10 meses consecutivos en el poder, en medio de denuncias de autoritarismo y fraude electoral.
Con información de López-Dóriga Digital y EFE