Ernestina Godoy Ramos, fiscal General de Justicia de la Ciudad de México, negó haber conspirado con jueces, magistrados, ni con Alejandro Gertz Manero, fiscal General de la República
Ernestina Godoy Ramos, fiscal General de Justicia de la Ciudad de México, negó haber conspirado con jueces, magistrados, ni con Alejandro Gertz Manero, fiscal General de la República (FGR), para dictar prisión preventiva en contra de Laura Morán Servín y Alejandra Cuevas, a quienes se les acusó de ‘garante accesoria’, figura que no existe como delito en la ley.
La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México está abierta al escrutinio público y a la evaluación constante. Nuestro trabajo es revisado todos los días por los diferentes órganos del Poder Judicial, así se confirman, rectifican o revocan nuestras actuaciones. Ni confabulaciones ni acuerdos al margen de la ley, estricto acatamiento a las órdenes judiciales”, expresó Godoy Ramos en conferencia de prensa tras la determinación de la Suprema Corte de otorgar amparos a Morán y Cuevas.
En un mensaje en video, la fiscal capitalina defendió la actuación de los agentes del ministerio público, de la juez y del magistrado que participaron en el caso, cuyas decisiones “en ningún momento estuvieron influidas por terceros ni por instrucciones al margen de la ley”.
Las y los ministros del máximo tribunal del país (…) en ningún caso sostuvieron que las autoridades hubiesen fabricado un delito, o que hubiesen manipulado la ley. La Suprema Corte de Justicia de la Nación tampoco refirió que las pruebas de cargo aportadas por la acusación fueran falsas o que se hubieran obtenido ilícitamente, o hubieran sido alteradas. No señaló en ningún momento que existiera alguna actuación irregular de esta fiscalía”, expresó.
Aseguró que la Fiscalía capitalina atenderá lo que le corresponda jurídicamente y esperará el engrose del caso que emita la SCJN.
Hago énfasis que tanto la parte denunciante como las denunciadas siempre hicieron valer su derecho de inconformarse con la presentación de pruebas y testimoniales y pruebas periciales y lo hicieron a través de los recursos procedentes, lo que garantizó el derecho de tutela judicial efectiva de las partes. Tal fue el caso que las decisiones en el resultado de los distintos recursos fueron favorables en diversos momentos a todas las partes sin que se advirtiera jurídicamente alguna inclinación hacia alguna de ellas”, comentó.
Con información de López-Dóriga Digital