Unicef tiene el objetivo de visitar a cada niño en Ucrania que está en una institución o familias de acogida y hacerle un expediente individualizado
Unicef planea visitar a cada uno de los 91 mil niños que hasta el inicio de la guerra vivían en orfanatos o estaban internados en otras instituciones en Ucrania, de los cuales casi la mitad tiene alguna forma de discapacidad.
Unos 35 mil de esos niños fueron devueltos apresuradamente a sus familias cuando la guerra empezó, dijo el asesor regional para la protección infantil de Unicef, Aaron Greenberg.
Muchos de los que volvieron a sus casas tenían discapacidades graves y por ello se considera que deben ser visitados por personal del programa que Unicef, en colaboración con ONG ucranianas, están poniendo en marcha con este fin.
“En coordinación con las entidades públicas tenemos el objetivo de visitar a cada niño que está en una institución y hacerle un expediente individualizado. Parece mucho pero esta semana ya hemos visitado a 800 niños y se están preparando los informes de esas visitas”, explicó a periodistas en Ginebra por teleconferencia.
Antes de la invasión rusa, Ucrania tenía el número de niños en instituciones de acogida más alto de Europa.
Las razones son extensas, pero entre ellas destaca que se trata de un sistema que desde la época en la que Ucrania era parte de la Unión Soviética tenía reconocimiento y visibilidad y las familias estaban convencidas de que era lo más adecuado para niños con necesidades especiales.
La gente veía los resultados de esa atención, que resulta más centralizada que el sistema del cuidado de los niños en familias de acogida, que puede parecer disperso y poco estable.
Desde Leópolis (Ucrania), Greenberg señaló que hasta la fecha casi dos tercios de los niños en Ucrania están desplazados internamente o han abandonado su país y ahora son refugiados, y casi todos – incluidos los que siguen en sus hogares- enfrentan la ausencia de sus padres, movilizados para el ejército.
La guerra en Ucrania ha provocado el desplazamiento forzoso de un total de 7.7 millones de personas y 5.7 millones de refugiados en menos de dos meses y medio.
Unicef, la agencia de Naciones Unidas dedicada a la protección de los niños, también está atendiendo a niños y a sus madres víctimas de violencia en general o de violencia sexual en Ucrania.
Según Greenberg, se han confirmado decenas de casos de violación de menores por parte de tropas rusas.
“Estamos haciendo proyecciones de lo que podría ser y anticipamos números en relación a todas las formas de violencia que seguramente serán de decenas de miles”, indicó el experto.
En medio de esta problemática, Unicef también intenta llamar la atención sobre la importancia de mantener la fuerza de trabajo relacionadas con el empleo social, la psicología infantil y otras profesiones que podrían ayudar a los niños y a sus familias a superar el trauma de la guerra.
“Este tipo de trabajadores deben recibir apoyo, se debe garantizar sus salarios, así como que ellos mismos reciban asistencia de salud mental”, pidió Greenberg.
Con información de EFE