Como alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet ha denunciado la situación en países como Nicaragua, Honduras y El Salvador
La alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, anunció en Ginebra que no se va a presentar a un segundo mandato, que asumió en 2018: “Esta sesión histórica será la última en la que compareceré”.
La declaración de Bachelet da a entender que la expresidenta chilena ya no estará al frente del principal órgano de derechos humanos de Naciones Unidas en la siguiente sesión del Consejo, que se celebrará del 12 de septiembre al 7 de octubre.
El 1 de septiembre de 2018, Bachelet fue nombrada alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, desde donde ha denunciado la situación en países como Nicaragua, a cuyo gobierno ha pedido la liberación de los detenidos durante las elecciones de 2021, y también en Honduras, El Salvador, México o Haití.
En cuanto a la invasión de Ucrania, Bachelet ha solicitado recientemente que se guarde toda la información sobre los asesinatos extrajudiciales a gran escala en Ucrania, de los cuales su oficina ha verificado hasta el momento 300.
Pero el anuncio de Bachelet se produce días después del viaje realizado a China entre el 23 y el 28 de mayo, por el que fue fuertemente criticado, entre otros, por el director ejecutivo de la ONG Human Rights Watch, Kenneth Roth, que la calificó de “desastrosa”.
Roth dijo que a Bachelet tendría que sucederle alguien “menos diplomático”. El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, es quien tiene que proponer a una personalidad para el cargo, que deberá ser aprobado por la Asamblea General de Naciones Unidas.
Michelle Bachelet fue la primera mujer en presidir la República de Chile (en dos periodos entre 2006-10 y 2014-18). Nació en Santiago de Chile el 29 de septiembre de 1951, es hija del general Alberto Bachelet, leal al expresidente Salvador Allende, fallecido en prisión por un infarto tras ser torturado en 1974.
Junto a su madre, Angela Jería, fue expulsada de Chile en 1975. Vivió en el exilio hasta 1979 en Australia y luego en la República Democrática Alemana (RDA), donde cursó medicina en la universidad de Humboldt (Berlín).
El 11 de marzo de 2000 tomó posesión como ministra de Salud y en enero de 2002 pasó a ocupar el puesto de ministra de Defensa.
En septiembre de 2004 dejó el Gobierno para preparar la campaña para las elecciones presidenciales de diciembre de 2005, en las que se impuso al conservador Sebastián Piñera en la segunda vuelta. Tomó posesión como presidenta de Chile el 11 de marzo de 2006.
Durante este primer mandato hizo frente a movilizaciones estudiantiles, impulsó un programa social y reformó el sistema de pensiones.
Además, instó al Congreso a la reapertura de las comisiones Retting y Valech sobre los desaparecidos y promulgó la ley de transparencia de la función pública y el derecho de acceso a la información de los órganos del Estado (2008).
El 11 de marzo de 2010, días después del terremoto del 27 de febrero en el centro del país que causó 497 muertos, entregó el poder al derechista Sebastián Piñera. Marcada por esa catástrofe, en 2010 creó la Fundación Dialoga, para colaborar en la reconstrucción del país.
Desde el 1 de enero de 2011 y hasta marzo de 2013 fue secretaria general adjunta de la ONU y directora ejecutiva de ONU Mujeres.
Luego volvió a la política chilena. Candidata socialista, en junio de 2013 se hizo con la nominación por la coalición Nueva Mayoría y en diciembre de ese año logró la victoria en la segunda vuelta de las presidenciales, con 62 por ciento de los votos, frente a Evelyn Matthei.
En este segundo mandato los pilares de su acción fueron las reformas educativa (2015 y 2016), tributaria (2014 y 2016) y la laboral (2016). Además, promulgó otras leyes como la electoral (2015), que sustituyó el sistema binominal por otro proporcional, y la de despenalización del aborto (2017).
También presentó los proyectos de ley que ponían en marcha la creación de la Convención Constitucional (2017) y otros para modificar el sistema de pensiones de capitalización individual, impuesto por Pinochet a comienzos de los 80 (2017).
En diciembre de ese año presentó el Plan Nacional de Derechos Humanos para la persecución de crímenes de lesa humanidad.
Su popularidad en este segundo mandato se vio enturbiada desde que a comienzos de 2015 se conociera que su hijo y su nuera, Natalia Compagnon, estaban relacionados con el polémico y lucrativo negocio inmobiliario del caso “Caval”.
Con información de EFE