El inicio del invierno ha traído episodios climáticos extremos y atípicos en todo el planeta, siguiendo la tendencia de todo el 2015
Este inicio de invierno está trayendo consigo episodios climáticos extremos, con anomalías en todo el planeta con fríos mayores de los esperados en algunas zonas, mayores incluso que en los polos, y con altas temperaturas en otras partes del mundo.
La semana de Navidad de este 2015 ha sido la más cálida desde que se tiene registro en muchas partes del mundo, siguiendo la tendencia a lo largo de todo este año.
En Estados Unidos, por ejemplo, no ha sido la excepción. En Filadelfia, cada día de este mes que está por terminar ha sido mucho más cálido de lo normal (comparado con los úlitmos 130 años).
Así, en el hemisferio Norte, donde estamos en el invierno, el pronóstico del tiempo en el Polo Norte marcará unos 4 grados, casi 17 grados por encima de la media para estas fechas, pese a ser una temporada en la que el sol no se asoma en dicha latitud.
Así, el sur de Texas y en el norte de nuestro país, hace más frío que en el Polo Norte.
No está siendo un invierno típico en el mundo, luego de un otoño muy seco y extremadamente lluvioso en otros sitios. Bajas presiones que van desde Islandia, llevan aire cálido del Norte a Sur, provocando fuertes tormentas e históricas inundaciones en Reino Unido, tocando ambas partes del Atlántico Norte desde la Península Ibérica hasta Groelandia y el Polo Norte.
Ello provocará un nuevo récord: el centro de Inglaterra tendrá las temperaturas más cálidas de su historia, incluso desde antes de la Revolución Industrial.
Mientras existen sequías en el Norte de España, en Australia y en Estados Unidos, provocan incendios, por el contrario, fuertes fríos y heladas en Texas, Nuevo México, y ventarrones, inundaciones y tornados han cobrado 40 muertos. Por su parte, los ríos Illinois y Misisipi están actualmente desbordados debido a las niveles récord de precipitaciones.
Como consecuencia, las heladas llegarán tarde esta temporada, aunque se estima que en cuanto lleguen, serán muy fuertes. Así, a mediados de enero se espera que llegue uno de los inviernos más duros conocidos en el Atlántico Norte.
Con información de Slate