De acuerdo con la OMS, la situación en el campo de refugiados de Al-Hol, en Siria, se requiere de ayuda humanitaria urgente
El intenso frío provocó la muerte de por lo menos 29 niños en solamente dos meses entre los civiles que buscan escapar de los últimos bolsones de violencia yihadista en el Este de Siria, informó la Organización Mundial de la Salud.
La entidad expresó su extrema preocupación por las condiciones en que se encuentran las personas que llegan a Al-Hol, donde esta instalado el principal campo para los desplazados por los combates contra el grupo radical Estado Islámico.
“Por lo menos 29 niños y recién nacidos están registrados como muertos en las últimas ocho semanas, principalmente por hipotermia, ya sea en el camino hacia el campamento o poco después de llegar“, informó la organización.
La OMS añadió que unas “23 mil personas, en su mayoría mujeres y niños que huyen de las hostilidades en las áreas rurales alrededor de Deir Ezzor“, llegaron al campamento en ese período.
Fuerzas kurdas y combatientes de tribus árabes locales, apoyados por una coalición encabezada por Estados Unidos, se enfrentan con los últimos remanentes del “califato” del grupo Estado Islámico en las proximidades de la localidad de Hajin en el valle del río Eufrates.
Muchas de esas personas “han hecho el trayecto caminando o han viajado en camiones abiertos durante días y noches en un invierno muy duro“.
Aún a pesar del intenso frío, esas caravanas seguidamente eran retenidas por horas en el camino mientras soldados hacían un recuento para verificar que no haya yihadistas mezclados entre los refugiados.
De acuerdo con la OMS, la situación en el campo de Al-Hol requiere ayuda humanitaria urgente.
“La situación en ese campo es crítica. Su población a triplicado (de 10 mil a casi 33 mil personas) en menos de dos meses”, alertó la entidad.
Con información de AFP