Minuto a Minuto

Deportes Cruz Azul gana 1-0 en casa de Monterrey
Cruz Azul toma la ventaja en la semifinal ante Rayados de Monterrey
Entretenimiento Coppola se emociona en Cannes y dedica su ‘Megalópolis’ a la “esperanza”
Francis Ford Coppola estuvo acompañado por una gran representación del equipo del filme y por varios miembros de su familia
Deportes Pumas revela sus primeras bajas tras Clausura 2024
Pumas adelantó que el cuerpo técnico y el área deportiva del Club ya trabajan en la conformación del plantel de cara al Apertura 2024
Nacional Maestros vandalizan propaganda electoral y oficinas de candidatos en Oaxaca
La CNTE rechazó la propuesta del presidente López Obrador de aceptar un aumento del 10 % al salario de los maestros
Internacional Greg Abbott indulta al asesino de un manifestante de Black Lives Matter en 2020
Abbott indultó a un exsargento del Ejército que había sido condenado a 25 años de prisión por haber matado a un manifestante de Black Lives Matter

La OEA condenó duramente la invasión a la embajada de México en Ecuador. ¿Qué hará México ahora que la OEA discuta el asesinato de un opositor venezolano en territorio chileno, por de sicarios del dictador Nicolas Maduro? Fácil: votará a favor de Maduro.

El crimen ha tensado las relaciones entre Chile y Venezuela: el presidente de Chile, Gabriel Boric le está demandado al sátrapa Maduro capturar a los asesinos del militar retirado venezolano Ronald Ojeda, quien estaba asilado en Santiago de Chile.

Ya la OEA condenó la semana pasada “enérgicamente la intrusión en la Embajada de México en Ecuador”, para sacar de allí a un asilado del presidente de México, su aliado Jorge Glanz, exvicepresidente de Rafael Correa, y condenado por la trama Odebrecht.

Estamos ante a dos casos de asilados: uno, por decisión del gobierno de Chile, y asesinado por órdenes de Maduro en territorio chileno; y otro, por decisión del gobierno de México, y extraído a la fuerza por la policía ecuatoriana de la legación mexicana.

El opositor venezolano asesinado gozaba de asilo político en Chile, tras haber escapado de una prisión venezolana, pero el 21 de febrero lo secuestraron agentes de Maduro y, nueve días después, su cuerpo apareció descuartizado en una maleta.

¿Qué posición tomará el presidente de México ante este asesinato político? Fácil: dirá que su gobierno no se entromete en asuntos de otros países. Sin embargo, es mentira que su gobierno no se entromete en asuntos de otros países.

Porque si un gobierno se entromete en asuntos de otros países es el actual gobierno mexicano. Para empezar, le han expulsado a tres embajadores (Bolivia, Perú y Ecuador) por declaraciones del presidente de México sobre sus asuntos internos.

Antes, hizo una intensa campaña personal para boicotear la Cumbre de las Américas en Estados Unidos. Y no sólo no asistió él: les pidió públicamente a Xiomara Castro, Alberto Fernández y Luis Arce de Bolivia que tampoco fueran.

El día de la independencia de Estados Unidos pidió desmontar la Estatua de la Libertad. Y agregó que “su Departamento de Estado es un departamentito”; y “los legisladores republicanos y algunos demócratas son hipócritas, irresponsables, grillos”.

El presidente de México también criticó al Parlamento Europeo por haber solicitado que el comité que otorga el Nobel de la Paz reconozca al presidente Volodímir Zelenski y al pueblo ucraniano por su resistencia a la invasión rusa.

Así que, ya que se mete tanto en asuntos de otros países, falta ver si el presidente condena el asesinato del opositor venezolano Ronald Ojeda en Chile, donde la Fiscalía sospecha de sicarios del cártel del narcotráfico “Tren de Aragua”, vinculado a Maduro.

Una oportunidad para condenar a Maduro.

Pero, eso, nunca.