Buscan evitar que más futbolistas cubanos huyan, luego de que el delantero Keiler García y el tercer portero Arael Arguellez escaparan.
Los futbolistas cubanos que participan en la Copa Oro son constantemente vigilados en hoteles, autobuses, aviones y estadios, para evitar que se escapen.
Y es que el pasado miércoles, Keiler García logró fugarse de la concentración en Chicago, y las autoridades estadounidenses no quieren que se den más casos similares.
Así, en el acceso al hotel Sheraton, en donde están concentrados en Chicago, se ha incrementado la seguridad y los agentes acompañan a los futbolistas a cada lugar al que viajan.
El portero Diosvelis Guerra, señaló a Mediotiempo que “siempre hemos tenido eso pero con la compañía de los entrenadores, nunca hemos tenido ni nos hemos sentido con la libertad de salir del hotel nosotros solos ni nada de eso porque incluso eso también es una regla, es algo disciplinario que tenemos nosotros”.
Sin embargo, el operativo no ha funcionado por completo, ya que el tercer portero Arael Arguellez se escapó en Phoenix.
El primer fugado, Keiler García fue entrevistado en Miami por la cadena Mira TV, y señaló que “desde que estaba en el entrenamiento del martes yo mismo sentía que tenía que hacerlo y de lo que estaba pendiente es que se me diera la oportunidad. (…)Tenía que bajar a desayunar, era de los últimos cuatro jugadores que quedaban para bajar a desayunar. Cuando bajé a desayunar vi la puerta abierta, caminé hacia ella y me fui, me mandé a correr y me fui”.
El motivo de su huida fue que quiere darles una mejor vida a su esposa, dos hijos, madre y hermano que siguen en Cuba.
En caso de que nadie más huya, la Selección Cubana regresará a la isla con solo 19 de los 22 jugadores que partieron para disputar la Copa Oro.
Con información de Medio Tiempo.