Elecciones 2024
Elecciones 2024

Como era ampliamente esperado, el Comité de Mercado Abierto de la Fed (FOMC, por su sigla en inglés) mantuvo la tasa de fondeo estable en un rango 0.0 a 0.25%, por decisión unánime.

Sin embargo, la atención del mercado estaba puesta en la conferencia de prensa y la publicación de nuevos estimados económicos buscando señales sobre la profundidad de la recesión, la evaluación de la Fed sobre las condiciones económicas y la voluntad del banco central de mantener o ampliar su compromiso de medidas de estímulo monetario.

Tanto en el comunicado como en la conferencia de prensa, la Fed destacó que la situación actual se caracteriza por presentar niveles de incertidumbre sin precedentes en la historia económica de Estados Unidos. Aunque Powell enfatizó que la economía partía de un punto sólido con un mercado laboral en pleno empleo, el choque exógeno de la pandemia ha generado una situación inédita.

Asimismo, Powell destacó que, aunque la situación del mercado laboral y de la economía parece haber tocado fondo en este segundo trimestre, es imposible descartar una nueva recaída. A pesar de este mensaje de incertidumbre, la Fed fue enfática en reiterar su compromiso inquebrantable de hacer todo lo que sea necesario y utilizar todo su arsenal de medidas de política monetaria para tratar de llevar a la economía a una situación de empleo como la que se tenía antes de la crisis, aunque esto tome tiempo.

En su primera revisión pública al escenario económico desde que comenzó la pandemia, la Fed hizo modificaciones sustanciales a sus proyecciones y a su guía de tasas. En concreto, la gráfica de puntos que revela la expectativa de la tasa de fondeo de los miembros del FOMC confirma el mensaje de que las tasas se mantendrán en el nivel actual por lo menos hasta la conclusión del 2022.

En términos de crecimiento, la Fed redujo su estimado para el 2020 de 2.0 a -6.5 por ciento. Sin embargo, también revisó al alza sus proyecciones para el 2021 (de 1.9 a 5.0%) y 2022 (de 1.8 a 3.5%), lo que implica que la economía recuperaría su nivel previo a la pandemia a mediados del 2022. No obstante, los niveles de empleo tardarían más en recuperarse.

La Fed revisó al alza sus estimados de la tasa de desempleo de 3.5 a 9.3% en el 2020, de 3.6 a 6.5% en el 2021 y de 3.7 a 5.5% en el 2022. Otro punto a destacar, es que a pesar de estar inyectando recursos en cantidades muy superiores y con mucha más velocidad que durante la Gran Recesión de 2008-09, la Fed no espera presiones inflacionarias en el mediano plazo. En concreto, la Fed redujo sus estimados del deflactor PCE –su medida predilecta de inflación– de 1.9 a 0.8% en el 2020, de 2.0 a 1.6% en el 2021 y de 2.0 a 1.7% en el 2022.

En la opinión de este columnista, la ausencia de presiones inflacionarias esperada por la Fed está relacionada con la holgura esperada en el mercado laboral y la experiencia de la Gran Recesión en la que las presiones inflacionarias brillaron por su ausencia.

Sin embargo, la inflación podría acercarse a su objetivo de 2.0% más pronto de lo esperado si la economía presenta una recuperación como la que espera la Fed, lo cual podría obligarla a comenzar la normalización de su política monetaria antes de lo esperado.