
Uno de los lugares que no te puedes perder al viajar a Islandia es Reynisfjara, una playa formada por arena y roca volcánica
Uno de los lugares que no te puedes perder al viajar a Islandia es Reynisfjara, o “Black Beach”. Está formada por arena y roca volcánica, rodeada de impresionantes columnas basálticas.

Está a unos 193 kilómetros de la capital, Reykjavik, en la costa sur de Islandia.
El agua es helada y además por sus fuertes corrientes marinas es considerada una de las playas más peligrosas del mundo.

Toma nota que incluso en verano tienes que ir bien abrigado, porque siempre hace frío en este país.

Las columnas de basalto se forman por el enfriamiento de la lava volcánica.

Si el enfriamiento es lento, la lava fría genera columnas bastante más regulares, tanto, que llegan a parecer una escalera. Los turistas aprovechan su forma para escalarlas y tomarse fotos en ellas.

Cerca de ahí se encuentra la playa Solheimasandur. En 1973, un avión de la Fuerza Aérea de Estados Unidos se quedó sin combustible y se estrelló ahí. Afortunadamente todos los tripulantes sobrevivieron.

Es un paisaje fuera de este mundo, formado por lo que queda del avión, junto al mar, en la orilla de una playa volcánica.
Para llegar ahí tienes que ir con un guía en un transporte especial 4×4, porque no hay un camino para autos.

Djúpalónssandu es otra playa volcánica que está situada al noroeste de Islandia, en la península de Snaefell.
Ahí encontré restos de barcos hundidos. Caminé entre pedazos de metal oxidado y piedras que tienen una textura muy suave, producto de la erosión que han tenido durante cientos de años.
Finalmente les platico que no todas las playas de Islandia son negras, fui a Rauðisandur de arena dorada.

Ahí me encontré un rebaño de ovejas que caminaban sobre la playa y se sentaron a comer el pasto que se encontraba junto a la arena. ¡Increíble experiencia!

Otra playa famosa es Breiðamerkursandur, la playa diamante, donde puedes ver pedazos de hielo que llegan flotando de los glaciares.
Se encuentra en la costa sureste a unos 45 minutos de Stokksnes, al lado del glaciar Jokilsarlon. “Ice diamond beach”, recibe su nombre por los pedazos de glaciares que brillan sobre la espectacular arena negra.
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