A menos que la reina Isabel así lo pida, los hijos de la pareja de los duques de Sussex no tendrán títulos nobiliarios y este es el porqué
El futuro hijo de Harry y Meghan Markle no podrá ser considerado príncipe o princesa de acuerdo con una ley establecida por el rey George V en 1917.
El bebé, que se espera que nazca en mayo de 2019, no alcanzará este grado a menos que la reina firme las llamadas “cartas patentes” con las que, expresamente, será ella quien le conceda un título nobiliario.
Cuando la duquesa de Cambridge, Kate Middleton, quedó embarazada de su primer hijo, la soberana emitió esas cartas para asegurar que los hijos de la pareja llevasen el título de príncipe o princesa.
De acuerdo con lo estimado, Isabel II podría hacer lo mismo con los hijos de su nieto Harry, quien es sexto en la línea de sucesión, después de su padre, el príncipe Carlos; su hermano, el príncipe William, y sus tres sobrinos, los príncipes George, Charlotte y Louis.

La medida, tomada por George V, reduce la cantidad de príncipes para que el círculo familiar de la realeza sea más limitado.
Aunque se espera que la reina conceda algún título, los hijos de Harry y Meghan serán tratados como ‘lady’ o ‘lord’ y el apellido Mountbatten-Windsor.
El mismo príncipe Harry llegó a revelar una vez que quería salir de la familia real y renunciar a su título nobiliario, pero al final sopesó que era mejor permanecer en ella para llevar a cabo, desde su posición, tareas útiles para la sociedad.
Los medios y las redes sociales ya han empezado a conjeturar sobre los posibles nombres del bebé, como el de Diana si es niña, en honor a la madre del príncipe Enrique Diana de Gales, o de Alejandro, en el caso de que sea varón.