Elecciones 2024
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Se realizó el último debate previo a la segunda vuelta en Brasil
Foto de AP

La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, prometió el viernes combatir la corrupción con más rigor tras ser cuestionada acerca de supuestos esquemas de sobornos en su gobierno, de cara a la segunda vuelta de los comicios presidenciales.

Durante el último debate de la campaña a menos de dos días de las elecciones, la primera pregunta del adversario Aécio Neves, del Partido de la Social Democracia, fue sobre un escándalo de corrupción en la paraestatal Petrobras, que de acuerdo con un reporte de una revista semanal, tanto Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT) como su predecesor tenían conocimiento del caso y se beneficiaron de esos sobornos.

La presidenta, quien buscar reelegirse para un segundo mandato de cuatro años, señaló que el semanario no tenía ninguna prueba y amenazó con presentar una demanda.

“Esta revista que apoya sistemáticamente a la oposición hizo una calumnia, una difamación… no presenta ninguna prueba de lo que habla. Y manifiesto aquí toda mi indignación”, expresó Rousseff. “Voy a investigar a los corruptos y a los corruptores, y los motivos por los cuales [el caso] llegó a ese punto”.

Los candidatos también tuvieron que responder a electores indecisos durante el debate organizado por la cadena Globo. Una persona en la audiencia preguntó a Rousseff cómo planeaba acabar con la corrupción y hacer que los culpables paguen por sus crímenes.

Las acusaciones de la revista Veja publicadas el viernes giran en torno al testimonio presentado por Alberto Youssef, un traficante de dinero que asevera que ayudó a lavar sobornos de algunos contratos de Petrobras.

La revista dice que Youssef testificó ante investigadores de la policía que el poder ejecutivo “estaba al tanto de todo”. Cuando se le preguntó quién en dicho poder sabía del plan, Youssef presuntamente respondió que tanto Rousseff como su predecesor, Luiz Inácio “Lula” da Silva, lo sabían.

Rousseff dirigió el consejo administrativo de Petrobras entre el 2003 y el 2010 mientras era ministra de Minas y Energía y luego jefa de gabinete de la Presidencia.

Las denuncias de corrupción volvieron a ser el foco de atención del último debate entre los dos candidatos que registró un nivel alto de espectadores. Rousseff dijo que la ley sobre el tema era muy permisiva y necesitaba reformarse en el Congreso. “Vamos a fijar medidas para garantizar que haya castigo para el que estaba corrompido o para el corruptor”, manifestó.

Neves, ex gobernador del estado de Minas Gerais, criticó a Rousseff y su partido por los casos de corrupción al decir que “millones de brasileños han tenido suficiente cada vez que abren el periódico y ven un nuevo escándalo de corrupción”.

“Vamos a quitar al PT del poder”, exclamó Neves.

En encuestas, Rousseff aventaja a Neves con al menos seis puntos porcentuales. Alrededor de 143 millones de brasileños están convocados a votar el domingo, tres semanas después de los comicios de primera vuelta en los que Rousseff resultó con 42% de los votos y Neves con el 34%.

Además de la corrupción, el débil crecimiento económico fue otro tema que ganó la atención durante el debate.

Después de expandirse un 7.5 por ciento en 2010, el año antes de que Rousseff asumiera el poder, la economía brasileña se ha debilitado y la expectativa de crecimiento para este año está por debajo de 0.5 por ciento. Así mismo, la inflación está por encima de la meta del gobierno de 6.5 por ciento.

Rousseff destacó que el desempleo en Brasil se encuentra en mínimos históricos y que los salarios de los trabajadores han aumentado.

La mandataria quiere mantener la fuerte participación del Estado en la economía, mientras que Neves, de la centro-derecha, quiere cortar el gasto público. Neves también propone buscar acuerdos comerciales con la Unión Europea, ampliar las relaciones comerciales con los Estados Unidos y privatizar empresas estatales que él califica como ineficientes.

En el debate, electores indecisos también lanzaron preguntas acerca de violencia, educación y falta de drenaje en alrededor de 40% de los hogares brasileños.

Neves dijo que en caso de ser elegido invertiría más en el patrullaje federal de las fronteras de Brasil a través de las cuales las drogas y las armas transitan con facilidad. Además, dijo que modificaría las relaciones con los países vecinos de donde se originan los narcóticos, como Perú, Bolivia y Colombia.

Rousseff subrayó esfuerzos que hizo para coordinar a las fuerzas federales y estatales de seguridad durante la Copa del Mundo de este año, un evento que transcurrió sin graves problemas de seguridad.

Con información de AP