Una serie de cintas sobre el soldado común que por patriotismo ofrendaba su vida, integra el ciclo de cine conmemorativo por los 100 años del inicio de la Primera Guerra Mundial (1914-1918), que será proyectado del 20 de agosto al 7 de septiembre en la Sala José Revueltas del Centro Cultural Universitario. En entrevista, Francisco … Continued
Una serie de cintas sobre el soldado común que por patriotismo ofrendaba su vida, integra el ciclo de cine conmemorativo por los 100 años del inicio de la Primera Guerra Mundial (1914-1918), que será proyectado del 20 de agosto al 7 de septiembre en la Sala José Revueltas del Centro Cultural Universitario.
En entrevista, Francisco Ohem, investigador cinematográfico de la Filmoteca de la UNAM, señaló que el ciclo comprende películas en las que también se exaltaba la humanidad, la convivencia y la camaradería, y aún se considera que esa fue la última guerra de los caballeros, en la que los oficiales veían al enemigo como soldados y no los deshumanizaban.
“También lo que llama la atención es que la relación del cine y la guerra va desde el inicio del séptimo arte, pues en 1898 cuando tenía tres años de haberse inventado el arte cinematográfico, se da la guerra entre España y Estados Unidos, llamada Guerra Hispano-estadounidense, que tuvo lugar en las últimas colonias que tuvo España como fue en Cuba, Puerto Rico y Filipinas”, explicó.
El investigador abundó que en este ciclo se contará con películas que fueron filmadas al momento, por ejemplo, el documental “La Batalla del Somme”, de Gran Bretaña, grabada en el valle del Somme en Francia, y en ese lugar después de un avance alemán por Bélgica se detuvo al ejército germano y generó una de las cuestiones que hicieron de esta guerra una batalla atípica.
“La Primera Guerra Mundial fue más bien una guerra estática, la imagen que tiene uno cuando se habla sobre este tema son las trincheras y estas eran verdaderas residencias en las que los soldados pasaban meses y los avances en ocasiones eran en centímetros o metros”, comentó Ohem.
Este documental, de 1916 con 70 minutos de duración, da cuenta de la ofensiva más grande que se organizó entre Inglaterra y Francia para tratar de ganar la guerra, señaló el investigador.
“Pero lo que es impresionante es el trabajo de dos camarógrafos que estaban adscritos al ejército inglés, con cargo militar y que tenían que sujetarse a la disciplina militar, entonces ellos fueron puestos en el lugar una semana antes de que se diera la orden de ataque”, apuntó.
Al término de la primera semana, acotó Ohem, los camarógrafos se fueron con todos los materiales a Inglaterra y empezaron a editarlos y ahí con un distribuidor tuvieron la idea de hacer la película, pero tenían que convencer al alto mando y a las autoridades de la censura civil pues el material era de tal riqueza que podían armar un filme de unos 70 minutos.
Después lograron convencer a la cúpula política y militar inglesa para hacer la película, entonces realizaron 300 copias y se exhibió simultáneamente a lo largo de todo el Reino Unido en 300 cines, y a seis semanas de su estreno fue vista por 20 millones de ingleses.
“Lo que también se sabe es que resultó todo lo contrario a lo que se temía, que en lugar de debilitar el espíritu de lucha, la película lo que generó fue una verdadera hermandad en la que el inglés que estaba en Inglaterra podía a través de la cinta compartir la experiencia con el hermano, que estaba jugándose la vida en el frente”, explicó.
El ciclo está conformado por películas como “La Batalla del Somme”, “El cinturón mágico”, “El camino hacia la Guerra 1870-1914”, “La Primera Guerra Mundial: Las grandes batallas de los frentes europeos”, “Armas al hombro”.
Así como “Alas”, “Sin novedad en el Frente”, “Adiós a las armas”, “La gran ilusión”, “La reina africana”, “Al Este del Paraíso”, “Patrulla infernal”, “Lawrence de Arabia”, “Doctor Zhivago”, “Hombres contra la Guerra”, “Johnny tomó su fusil”, “Gallipoli”, “África mía”, “Feliz Navidad”, “Amor eterno” y “Caballo de guerra”.
Con información de Notimex