En los últimos años, correr se ha hecho bastante popular. Y no es para menos, pues la actividad ejercita más de 200 músculos, además de la mente, y produce la serotonina, también llamada hormona de la felicidad, que causa esa euforia del corredor después de acabar sudado y cansado. Quizás sea esto lo que ha … Continued
En los últimos años, correr se ha hecho bastante popular. Y no es para menos, pues la actividad ejercita más de 200 músculos, además de la mente, y produce la serotonina, también llamada hormona de la felicidad, que causa esa euforia del corredor después de acabar sudado y cansado.
Quizás sea esto lo que ha provocado el boom de los maratones, que tan solo en España se celebran más de 100 carreras en la Comunidad de Madrid. “Cada fin de semana hay alguna carrera en la región”, asegura David Rumbao, de la carrera “Madrid corre por Madrid”. Pero la carrera más popular de Madrid es la “San Silvestre Vallecana”. En el 2005, participaron más de 17 mil personas en esta carrera, que ocho años después ya reunía 40 mil.
Las hay de todas las distancias, para todas las edades, a favor de todas las causas. También de todos los precios, porque en los amratones se paga por correr. Estos van desde los 3 a los 18 euros.
“Las carreras populares son el momento culminante de todo corredor. Muchos runners se preparan día a día para conseguir algún objetivo personal y otros simplemente lo viven como una fiesta y disfrutan de la carrera rodeados de apasionados del atletismo como ellos”, explica David Rumbao.
No sólo en la ciudad se organizan las carreras, pues muchos han optado por los maratones en montaña, a desnivel, con una vista diferente, con una mayor dificultad, pero al mismo tiempo, para muchos de ellos, más llenadora.
Aunque algunos opinan que todas las carreras deberían estar reguladas por el gobierno para así poder tener un control y contabilizarlas de una forma más adecuada, otros opinan que esto sólo ocasionaría que los precios por participar en ellas fuera mayor. Al final, el resultado es el mismo, pues se desconoce en que se utiliza el dinero.
“Hace unos años, las carreras se organizaban con fines deportivos. Ahora el objetivo es hacer dinero”, denuncia José Cano, veterano organizador de carreras como el Trofeo José Cano. Coincide Guillermo Ferrero, que opina que “muchas empresas que se dedican a otros negocios que tienen nada que ver con el deporte están metiendo la nariz en esto. Ganan dinero si la participación es muy alta”.
Claro que no todas las carreras lucran. Otras presumen su solidaridad, como la Milla Solidaria del Mayor, en la que los corredores son mayores de 75 años. En silla de ruedas, andador, bastón, o sólo sus dos piernas, realizan la milla con ayuda de voluntarios jóvenes.
¿Es el running el nuevo golf, una moda que no está hecha para atletas, sino para lucirse? Las opiniones son variadas, pero al final lo importante es hacer deporte y seguir en movimiento.
Con información de El País