Así acaban todas las revoluciones en la granja: unos son más iguales que otros, como los cerdos mandantes de Orwell, que al final de la transformación asumen el papel de dueños que desempeñaban los humanos
López Obrador quitó las pensiones a los expresidentes el 5 noviembre de 2018. Pero él se aprobó una pensión y una guardia personal de militares de élite. Así vive en su rancho, valorado en 37 millones de pesos.
Este esquema de la izquierda en el poder, de privilegios para los machucones de sus proyectos, viene de Cuba, cuyo rol ideológico es el de un Vaticano socialista para López Obrador, Maduro, Ortega: todos iguales, pero unos más que otros.
En Cuba, 90% vive en extrema pobreza. Es el país más pobre de América Latina, por delante de Venezuela y Honduras, según un estudio de la firma DatoWorld. Pero al morir, Fidel Castro dejó a sus hijos
sus hijos una herencia de 900 millones de dólares.
Fidel Castro decía que su fortuna cabía en un bolsillo. López Obrador, que no tiene propiedades y vive con 200 pesos. Pero Forbes cifra la herencia de Castro en 900 millones de dólares, isla privada, 20 mansiones, una marina, cuentas en Suiza y una mina de oro.
De acuerdo con una solicitud de información con folio 3300264 24002874 realizada por EL UNIVERSAL, López Obrador tiene un “pensión, seguridad y protección militar” en su rancho, cercado con alambre, y, al costado, hay un hotel con alberca.
López Obrador admitió en una de sus últimas Mañaneras, que su gobierno invirtió dos mil millones de pesos en obras alrededores de su rancho, lo que duplicó su valor catastral: hospital de primer mundo, cuartel militar, parques, un campus universitario.
La quinta tiene acceso al Tren Interoceánico y al Tren Maya, dos obras de López Obrador que llegan hasta allí mismo. El Tren Maya costaría 230 mil millones de pesos, pero acabó costando el triple. Gonzalo, hijo de López Obrador, es supervisor del Tren Interoceánico.
La finca es lo que, en el sector inmobiliario, venderían como “un sueño tropical”: recién restaurada, 14 kilómetros cuadrados, árboles frutales y de maderas preciosas, sendero para caminar en medio de la floresta, puente de madera, monos, aves exóticas.
Todo, según el manual del Vaticano socialista, donde el dictador, Raúl Castro, hizo un cementerio particular en una área ecológica protegida: Sierra Cristal, un refugio de especies endémicas, con una cascada con una caída de 120 metros de altura.
Pero, a poca distancia del panteón familiar de Raúl Castro, en el camposanto de Mayabe, los nichos son profanados: huesos expuestos a la intemperie. Jorge Luis, un usuario de Facebook, mostró imágenes de los despojos de seres queridos vandalizados.
Así acaban todas las revoluciones en la granja: unos son más iguales que otros, como los cerdos mandantes de Orwell, que al final de la transformación asumen el papel de dueños que desempeñaban los humanos.
Hay razas, dirían.