Elecciones 2024
Elecciones 2024

Este martes 4 de abril de 2023 Estados Unidos escribió una nueva e importante página en su historia. El triunfo de la verdad y la justicia, sobre la mentira y el abuso, demostrando que nadie, en esta superpotencia, está al margen de la ley.

Tras la investigación de 5 años el expresidente Donald Trump tuvo que presentarse ante una corte en Manhattan, NY, donde se leyeron 34 cargos en contra del expresidente, cargos, de los que por cierto, negó que fuera culpable.

La explosiva noticia que se esparció como reguero de pólvora en Estados Unidos y todo el mundo, generó millones de reacciones a favor, celebrando y festejando la consignación de Trump, quien enfrenta al menos 4 procesos más serios, con otras posibles consignaciones criminales.

Por supuesto que el expresidente no se iba a quedar callado, y desde que se enteró que tendría que presentarse ante la corte respondió con una fuerte declaración atacando al presidente Joe Biden, los demócratas y al fiscal de distrito Alvin Bragg, asegurando “todo es parte de “una persecución política e interferencia electoral, al más alto nivel en la historia”.

Dijo que la consignación es solo “parte de una cacería de brujas” como calificó las investigaciones sobre la probada colusión de su comité de campaña con Rusia.

Se dijo víctima de “ataques que comenzaron desde que anunció su intención de contender por la nominación en 2024, hasta los dos juicios políticos que enfrentó, como ningún otro mandatario, y que sin ver la evidencia, senadores republicanos lo “absolvieron” y el cateo a su residencia de Florida, para recuperar miles de documentos Top Secret, altamente sensitivos que se llevó ilegalmente y no quiere regresar, argumentando que “son suyos”.

“Nunca en la historia de nuestra nación se ha hecho esto” dijo Trump, acusando a los demócratas, de lo que justamente hacía su gobierno: convertir las dependencias del gobierno en armas políticas y “augurando” que todo se revertirá en su favor.

El exvicepresidente Mike Pence, potencial candidato a la nominación presidencial republicana reconoció que “nadie debe estar encima de la ley,” pero -con fines de manipulación política- atribuyó la consignación al fiscal de distrito Alvin Bragg y no al gran jurado.

Legisladores republicanos, designados por el expresidente o cuyas carreras dependen de él, como Kevin Mc Carthy, líder de la mayoría republicana en la Cámara Baja del Congreso, calificaron el martes 30 de marzo, cuando se supo que tendría que comparecer en la corte, como un “día negro” diciendo que “el pueblo americano no tolerará esta injusticia”, que “la consignación es ejemplo del uso de agencias del gobierno para eliminar a los oponentes”.

Días antes del anuncio, el servicio secreto, los abogados de Trump y la policía de Nueva York, que implementó un dispositivo de seguridad, iniciaron la planificación del viaje de Donald Trump a Nueva York, para ser notificado y tomadas su fotografía y huellas digitales, así como para hacer los trámites de libertad bajo fianza.

Apenas se difundió la noticia de su consignación criminal, Trump inundó su red social con declaraciones, rechazando que haya tenido las relaciones extramaritales con la actriz porno Stormy Daniels desde 2006 y con Karen Mc Dougal, exconejita de Playboy, a la que también entrego dinero.

Trump, que tiene el apoyo del 40% de los miembros del partido republicano, con lo que se mantiene a la cabeza de los contendientes por la nominación presidencial, dijo a través de sus voceros, que la consignación viene de una nación fallida y que será reelegido con la mayor captación de votos en la historia de esta nación.

Taylor Budovich, CEO de Make America Great Again, dijo que “el presidente Trump promete el “fin pacífico de la guerra en Ucrania, desmantelar el estado profundo y salvar al país” y agregó que “debido a eso, las élites políticas se han apoderado del gobierno de este país, para detenerlo, pero fallarán”.

La primera de lo que se espera cuando menos sean otras 4 consignaciones criminales, generó un ambiente de división, polarización y posible confrontación, para las elecciones de 2024, que serán aprovechadas por algunos republicanos para presionar por un cambio y postularse como candidatos.

*Texto publicado en LA Times y reproducido con autorización del autor