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Este miércoles se dará el primer anuncio de política monetaria del año por parte de la Reserva Federal (Fed).

El mercado tiene ampliamente descontado que la reserva dejará la tasa sin cambios, los futuros de tasas asignan una probabilidad de 87% a que la tasa no se moverá.

No obstante, la atención del mercado está centrada en el contenido del comunicado de prensa y el discurso del presidente de la Fed, Jay Powell. En este sentido, el mercado está esperando que la Fed muestre una postura balanceada consistente con la observada en la reunión de diciembre, confirmando la expectativa de que la Fed planea mantener la tasa sin cambios en el nivel actual de 1.50-1.75% en este 2020 después de haber realizado tres recortes de 0.25% cada uno en el 2019.

Aunque las tensiones geopolíticas que preocupaban a la Fed (como el enfrentamiento comercial entre Estados Unidos y China y la amenaza de un conflicto armado en el Medio Oriente) han disminuido y el escenario base para el resto del 2020 es consistente con esta expectativa, las tendencias en los mercados de futuros de tasas en las últimas semanas han comenzado a incorporar la probabilidad de un recorte en la tasa de interés de referencia antes de que concluya el año.

Estas tendencias se vinieron acentuando en las últimas semanas ante un deterioro en las expectativas de crecimiento económico a nivel global, principalmente en China como consecuencia del riesgo de que el brote de coronavirus tenga un impacto mayor al esperado y que pudiera haber un contagio internacional.

Asimismo, los mercados también le temen a la posibilidad de que la administración Trump abra un nuevo frente en la guerra comercial con la Unión Europea. Tomando en cuenta este contexto, es muy probable que la Fed mantenga su postura de que no hay una trayectoria predeterminada para las tasas de interés y que las decisiones del Comité de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés) dependerán del comportamiento de los datos económicos.

No obstante, la fortaleza del mercado laboral, el sólido comportamiento de la economía y la creación de empleo comenzaron a mostrar algunas señales de desaceleración y la inflación se mantiene por debajo del objetivo de la Fed.

En este contexto, el mercado podría interpretar el comentario en torno a que las decisiones del FOMC dependerán del comportamiento de los datos económicos como una señal de que si la Fed llegara a actuar en este 2020, el movimiento probablemente sería hacia la baja.

La Fed seguramente enfatizará una posición flexible y de atención al comportamiento de la economía doméstica y las condiciones globales. Además de la decisión de la Fed, el calendario económico de esta semana viene bastante cargado de datos, incluyendo la publicación de las cifras preliminares del PIB para el cuarto trimestre en Estados Unidos y México, así como los datos de finanzas públicas a diciembre en nuestro país.