Sí: el presidente de México basó en una gran mentira histórica la entrega de la orden del Águila Azteca
El presidente basó en una mentira histórica, comprobable en hechos y datos, la entrega de la máxima orden mexicana, al afirmar que se la dio al gobernante designado cubano, por el ejemplo de “independencia” de la isla bajo la dictadura.
Cuba consintió de 1959-90 la invasión de la ex Unión Soviética, al aceptar ser mantenida económicamente a cambio ser una base militar soviética de 111 mil kilómetros cuadrados, a 90 millas de Estados Unidos. Regaló su independencia a una potencia extranjera.
En el año del triunfo comunista, le aceptó créditos blandos por tres mil 300 millones de dólares, y la venta de toda su azúcar de caña a un precio menor al del mercado mundial, aceptándole en dólares el 20 por ciento y recibir el resto en tecnología soviética.
Uno de los símbolos del arrodillamiento de Cuba al imperio soviético fue en 1975, cuando la propuesta de la candidatura de Fidel Castro para dirigir el Partido Comunista, la hizo un polaco que fue enviado por Stalin a Cuba a fundar el partido en 1925.
O sea, la propuesta fue hecha por un agente soviético, Fabio Grobart, y no por el cubano negro Blas Roca, que había estado entre los militantes fundadores del partido. Fue un acto obsceno de sometimiento al comunismo prosoviético y estalinista.
Lo peor fue que Cuba cedió su independencia a la URSS a cambio del empobrecimiento del país, y de ser una nación mantenida. Aceptó hasta dedicarse al monocultivo de caña de azúcar, para contentar el paladar ruso, que sólo conocía azúcar de remolacha.
Sembró sólo caña de azúcar, a sabiendas de que ésta ya no tenía futuro, pues desde 1966 la ciencia había conseguido convertir el azúcar D-glucosa en D-fructosa mediante una enzima sintetizada: o sea, se producían edulcorantes a partir de la harina de maíz.
¿Que Cuba tampoco era independiente de Estados Unidos antes de 1959, cuando era una nación con elecciones libres, libertad de expresión y de movimiento, con economía de mercado?
Pues como aliada de Estados Unidos, Cuba fue el primer país de América Latina en aceptar el voto de la mujer, jornada laboral de 8 horas, semana laboral de 48 horas, vacaciones pagadas de un mes, seguros sociales obligatorios, pensiones, salario mínimo.
Construía cinco mil edificios por año, el 34 por ciento de la tierra se destinaba a la ganadería y alimentos, suficientes para garantizar 75 por ciento del consumo interno; había coche por cada 40 personas, teléfono por cada 38, radio por cada seis, TV por cada 25.
Y hoy depende de la pobre Venezuela, como antes de la URSS.
Sí: el presidente de México basó en una gran mentira histórica la entrega de la orden del Águila Azteca.
Penoso.