Pero de enero a septiembre fueron creados apenas 124 mil empleos. Total, no hacia falta ni dar trabajo ni trabajar: las familias recibían del gobierno 11 mil pesos, según el INEGI
diciembre 4, 2024
Transcurrido medio año de las elecciones, cada día se desinfla la burbuja de consumo que rellenó el régimen con transferencias en efectivo para incentivar el voto a su favor: la creación de empleos, de julio a septiembre, fue la más baja en 10 años.
Y el gasto de las familias bajó 0.3%. Tomar café en cafeterías se encareció 6.61% y comer en restaurantes, 6.19. ¿Tomar café y comer fuera es uso y costumbre de quienes más tienen? Pues el costo de los tacos creció 8%, barbacoa y birria, 5.56 y pollo rostizado, 4.16.
La burbuja artificial no sólo ponchó ya a nivel de calle: también en el mundo de los millones de dólares: en octubre se fueron de México 71 mil 500 millones de capitales, porque las calificadoras económicas globales dieron a la baja su evaluación del futuro del país.
Moody´s cambió la calificación de México “de estable a negativa, por el debilitamiento institucional que amenaza con socavar los resultados económicos”. Se refiere a la captura, por parte del gobierno, del INE y Suprema Corte de Justicia, y el exterminio de los organismos autónomos.
Otra calificadora, Standard & Poors, recortó al país las perspectivas de crecimiento para 2025 de 1,5% a 1,2%, que es la mitad de lo que proyectó el gobierno. La conclusión de la entidad es que “dudamos que México siga siendo una economía consolidada fiscalmente”.
Fue la burbuja de consumo que hoy se vacía, lo que dio el triunfo electoral a Claudia Sheinbaum, gracias, además, a que 23 mil trabajadores estatales, llamados Siervos de la Nación, advertían a la gente que ni no votaba por la candidata oficialista, perdían los programas sociales.
También ganó por su promesa de que los mexicanos no necesitan trabajar para vivir bien: y aumentó el número programas sociales de López Obrador. Él tenía Presupuesto de ocho billones de pesos; ella, de nueve billones. Ese ritmo será insostenible, porque la mayor parte se van en becas.
Para pagar becas (y que 30 millones vivan sin trabajar o trabajando poco), este régimen endeudó a México como nunca en la historia: uno de cada cinco pesos que pidió prestados, se le fueron en condicionar el voto para Sheinbaum, con incentivos de dinero.
El endeudamiento interno es de un billón 990 mil millones de pesos; y el externo, de 18 mil millones de dólares. Eso no le importan a quienes votaron por seguir recibiendo lana: su culpa es menor, comparada con la responsabilidad de quien prometió.
Pero de enero a septiembre fueron creados apenas 124 mil empleos. Total, no hacia falta ni dar trabajo ni trabajar: las familias recibían del gobierno 11 mil pesos, según el INEGI.
Lo dicho: pan para hoy y hambre para mañana.