Canadá, Reino Unido y otros países también han identificado y analizan estas variantes que, de acuerdo al Dr. Scott Roberts, experto en epidemiología y enfermedades infecciosas de la Universidad de Yale, “tienen dos mutaciones de protrusiones o puntas de proteínas”
En medio de un agitado clima político electoral, una amenaza superada y casi olvidada, resurge y se incorpora lentamente, a la incertidumbre que enfrenta la democracia mas grande del mundo este año 2024: Se trata de Covid19, en nueva presentación; las sub-variantes de Omicron, KP.1, KP.3 y KP.1.1, colectivamente conocidas como FLiRT, que son más fácil de contagiar y con síntomas aparentemente mas graves para personas con bajas defensas.
Canadá, Reino Unido y otros países también han identificado y analizan estas variantes que, de acuerdo al Dr. Scott Roberts, experto en epidemiología y enfermedades infecciosas de la Universidad de Yale, “tienen dos mutaciones de protrusiones o puntas de proteínas”, en la superficie del virus, que “hacen mas fácil que el virus evada defensas que la gente contrae a través de vacunas o por enfermedad previa.”
Enfatizan en que, la vacuna, sí bien no es seguro que impida la infección, si “contribuye significativamente” al riesgo de enfermedades mas severas, hospitalización y muerte por Covid.
“Si se materializa una nueva oleada de las variantes de Covid19 este Verano, estamos menos preparados para navegar en esas aguas turbulentas, por la controversia y creciente indiferencia de la gente, advierte el Dr. Ziyad Al Ali, Epidemiólogo e investigador del sistema de Servicios Medicos a Veteranos.
Tras una drástica reducción a solo 7.000 casos diarios de Covid19, en Enero de este año, las infecciones de las nuevas variantes, aumentaron 28% a nivel nacional, con el estado de California a la cabeza, en aparente conexión con concentraciones de aguas negras en algunas áreas, como San Francisco. Los científicos aclaran que el Coronavirus esta presente durante todo el año y que las hospitalizaciones siempre han aumentado los meses de Verano, cuando la gente viaja mas y el clima es húmedo. En Abril de 2023, se registraron solo 2,000 muertes por esa enfermedad.
Las nuevas variantes representan, mayor amenaza para personas con débil sistema inmunológico, generalmente de edad avanzada. Sin embargo, la respuesta de las autoridades de salud, contrasta con la de 2020, ya que ahora solo abordan el tema para dar actualizaciones y nuevos datos de ese problema.
Todo indica que bajo el intenso clima electoral y mal recuerdo del controversial manejo de la mortífera Pandemia de 2020, que infectó a 11 millones 33,915 personas, causó la muerte de 1 millón 219 mil 487 y de la que se recuperaron 109 millones 814 mil 428 personas, en Estados Unidos, amén del colapso de la economía, desempleo, cuarentenas, ahora la situación es diferente.
El Centro de Previsión y Control de Enfermedades (CDC) y otras autoridades sanitarias no han iniciado campañas de información, distribución gratuita de pruebas para detección y mucho menos vacunas, que 270 millones de la población ha recibido al menos una vez y 230 millones 637 mil 348 esta totalmente vacunada. Para evitar nuevos ataques de Trump y Republicanos que falsamente argumentan que la aplicación de vacunas y uso de mascarillas “violan sus derechos Constitucionales,” tampoco se ha recomendado a personas que resulten positivas, recluirse al menos 5 días, para evitar el contagio.
Trump ha prometido que, de llegar de nuevo a la Casa Blanca, desmantelaría la Oficina de Preparación de Respuesta a Pandemias, que acaba de realizar un gran trabajo en el control de la Fiebre Aviar en granjas avícolas, para contener el virus y cuyo presupuesto fue aprobado en 2022, por legisladores Republicanos y Demócratas, en el Congreso.
En Carolina del Norte, legisladores Republicanos acaban de proponer una iniciativa para criminalizar el uso de máscaras en público, aun cuando se deba a razones medicas. Otras entidades analizan medidas similares.
Prácticamente, ahora, el cuidado esta mas a nivel individual. Aparente legado de la triste politización de un problema de salud pública, por el expresidente Donald Trump, quien lejos de tomar medidas urgentes, cuando fué informado del brote en Enero de 2020, no encomendó la respuesta a la Pandemia, a los especialistas científico, mientras que, sin antecedentes ni conocimiento, obstruyó su trabajo, ocultó criminalmente la información, impidió durante 3 meses, la contención del contagio, como se había hecho bajo otras administraciones presidenciales, con brotes epidémicos como SARS, Gripe Aviar, H1N1 y otros. Trump desplazó al CDC, criticó sus pruebas, sus recomendaciones de usar mascarillas y el cierre de escuelas, centros de trabajo o la cancelación de eventos, para evitar la propagación y ordeno restablecer actividades antes de lo programado.
A pesar de su desplazamiento, el Dr. Anthony Fauci, reconocido y respetado experto en enfermedades infecciosas en todo el mundo, hizo cuanto pudo, ante un protagónico presidente que sin tener idea de la magnitud del desafío, nombró a Mike Pence, su vicepresidente, para dirigir el esfuerzo, en el que no se canalizó suficiente ayuda a estados gobernados por demócratas.
El doctor Roberts, de la escuela de Medicina de la Universidad de Yale y otros especialistas, afirman que el impacto de las nuevas variantes sobrepasa los de la cepa JN.1. registrada el invierno pasado, por lo que recomienda la protección de las vacunas, para evitar un problema mayor.