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¡Hola de nuevo!

La colaboración de hoy está dedicada a las mujeres. No solo porque estamos en el marco del día internacional de la mujer, que se celebra mundialmente el 8 de marzo, sino también porque tener en cuenta la perspectiva de género resulta fundamental para una sociedad incluyente, más participativa e inteligente.

Hoy hablaremos de las mujeres y la economía.

Decía que la perspectiva de género es fundamental para una sociedad incluyente. Estoy de acuerdo en todo el tema de la igualdad de género, considerando que como personas tenemos los mismos derechos y obligaciones. Hombres y mujeres por igual estamos regidos por las mismas leyes. En lo que no estoy de acuerdo es en considerarnos realmente iguales puesto que no lo somos.

Las mujeres tenemos cualidades que los hombres no tienen y viceversa. En muchos casos las mujeres no contamos con la misma fuerza física que un hombre, pero, por otro lado, nosotras tenemos una sensibilidad especial. Somos mucho más gregarias, nos gusta trabajar en equipo, tenemos una intuición más desarrollada y somos más conservadores con respecto a tomar riesgos. Esas cualidades bien pueden empatar en las empresas para que éstas tengan un crecimiento y desarrollo equilibrado. Por eso, incluir mujeres en todos los ámbitos de la sociedad enriquece y a nivel empresarial resulta muy favorable.

Dime qué piensas de la inclusión de las mujeres en puestos directivos y en el ámbito laboral. Cuéntame por twitter en @MarijoCodesal. Me interesa mucho saber qué piensas. Cuéntame si estás de acuerdo con lo que te platico o no.

También mencioné que era importante para la sociedad la participación de las mujeres. Nosotras tenemos nuestra forma de ver el mundo. Tenemos problemas un tanto diferentes a los de los hombres. Sobre todo, en la parte de ser madres.

La participación de las mujeres en el ámbito social y político también es una manera de enriquecer la cultura, la visión y el desarrollo de un país.

Querer participar depende de nosotras. Por mucha inclusión que haya, si nosotras no estamos dispuestas a participar, nada cambia.

Y, por último, pero no menos importante, considerar la inclusión de las mujeres es una decisión inteligente para las sociedades. Incluirnos nos hace más ricos económicamente hablando. La inclusión de la mujer en el mercado laboral ha permitido reducir en un 30 por ciento la pobreza extrema (Banco Mundial).

De acuerdo con cifras de ONU Mujeres, “si las tasas de empleo remunerado de las mujeres se incrementaran hasta equipararse a las de los hombres, se estima que el producto interno bruto de Estados Unidos sería un 9 por ciento mayor, el de la zona del euro aumentaría un 13 por ciento y el de Japón un 16 por ciento. En las 15 economías en desarrollo más importantes, los ingresos per cápita crecerían un 14 por ciento de aquí a 2020 y un 20 por ciento hasta 2030.”  Suena bien, ¿no creen?  Si eso pasa, ganamos todos.

En México, la población de mujeres económicamente activa y que está trabajando es del 37 por ciento aproximadamente. Es decir, 19 millones 907 mil 543 mujeres estamos trabajando.

Es un porcentaje muy por debajo del verdadero potencial económico que tiene este país. Pero ojo, no se trata de que todas las mujeres nos pongamos a trabajar a tontas y a locas. Sino de cómo podemos incorporarnos al mercado laboral. Mi particular opinión es que urge que el emprendimiento tenga perspectiva de género. Crear empresas hechas y dirigidas por mujeres y para que más mujeres trabajen. Esto nos permitiría entender los distintos roles de la mujer como madre, esposa y profesional a la vez. Nos haría plantear mejores esquemas laborales en donde el trabajo pueda medirse por resultados y no por horas nalga en una oficina. En donde tener un hijo malito en casa o asistir a las actividades de los pequeños no sea motivo de descuentos salariales.

Al mismo tiempo, las empresas que ya están constituidas necesitan cambiar su dinámica laboral para incluir más mujeres. También tienen que hacer un gran esfuerzo para homologar los salarios que todavía, y por mucho, son inferiores a los de los hombres realizando el mismo trabajo.

Además, mujeres, ser independientes económicamente nos pone ipso facto en una situación de igualdad con nuestras parejas. Eso nos da mucho mayor libertad en la toma de decisiones personales.

Por otro lado, las finanzas personales que llevamos las mujeres son un tanto más complicadas que las de los hombres. Es como si tuviéramos dos carteras. Una, la de la casa y la otra, personal. El 65 por ciento de las decisiones de compra la tenemos las mujeres. Decidimos un montón de cosas menos qué coche comprar, eso sí. De hecho, a nivel global, las mujeres tenemos a nuestro cargo la preparación de los alimentos del hogar en el 85-90 por ciento de los casos estudiados en una amplia variedad de países (ONU Mujeres). Por eso, como llevamos las finanzas de la casa y las personales son de vital importancia para cualquier mujer.

Las invito a que visiten www.loquegastamoslasmujeres.com/ que es un espacio de finanzas personales con perspectiva de género en donde podrán encontrar mucha información y recursos completamente gratis para cuidar nuestro dinero.

 

Chicas, ¿quieren saber la mejor parte?

Que al involucrarnos, participar y aportar con nuestro trabajo podemos hacer crecer a nuestro país en todos los sentidos, económicamente también y eso nos pone en una situación de igualdad y de bienestar personal mucho mejor.

No dejes de enviarme tus dudas, preguntas e intereses a [email protected].

También podemos seguir esta conversación por las redes sociales. Aquí hay una oreja y una compañera para viajar al fascinante mundo de las finanzas personales.