Si ayer en MILENIO se reconstruyó el empoderamiento de la sección 22 desde una gubernatura priista (a costa de la deficiente formación escolar de los niños de Oaxaca y del erario federal), hoy conviene leer a Francisco Mejía sobre los grupos de choque que han hecho temible a esa facción magisterial. En el reportaje resalta … Continued
Si ayer en MILENIO se reconstruyó el empoderamiento de la sección 22 desde una gubernatura priista (a costa de la deficiente formación escolar de los niños de Oaxaca y del erario federal), hoy conviene leer a Francisco Mejía sobre los grupos de choque que han hecho temible a esa facción magisterial.
En el reportaje resalta el dato de que medio centenar de dirigentes “duros” ha viajado al extranjero (incluida la Venezuela chavista y de Nicolás Maduro) para aprender tácticas de lucha, que van de la instalación de barricadas en calles y avenidas a los ataques a comercios, vehículos, cajeros automáticos o casillas electorales.
Son esos grupos los que están detrás de incontables actos de vandalismo y de los asaltos, a pedradas, cohetones y garrotazos, para “recuperar” planteles donde los padres de familia ya no quieren a la 22.
Virulentos comandos civiles esencialmente protofascistas, los “profesores” jurídicamente “servidores públicos”, que cometen todo tipo de delitos pero que, financiados por el Estado, siguen inexplicablemente gozando de impunidad.