Y es que en política internacional, como en la nacional, también tiene sus otros datos. Pero no cabe duda que ese no es su mejor escenario y que la mejor política exterior no es siempre la mejor política interior
Lo que dice y hace devalúa lo que hace y dice.
Florestán
Los conflictos internacionales no le vienen bien al presidente López Obrador a menos que se trate de identificados con su ideología: Evo Morales, de Bolivia a quien mandó traer en un vuelo especial de la FAM, Pedro Castillo, peruano que quiso dar un golpe de Estado vía la disolución del congreso que lo había destituido, al que ha expresado todo su apoyo y desconocido a su sucesora por espuria, a su amigo el argentino Alberto Fernández, al cubano Miguel Díaz-Canel al que ha beneficiado con donaciones de petróleo, contratación de médicos y compra de vacunas sin aprobar por la OMS, a Nicolás Maduro, al sátrapa de Daniel Ortega al que ha sido incapaz de levantarle la ceja a pesar de todas las violaciones a los nicaragüenses.
E ir más lejos en la crisis con el gobierno de España, la ofensiva contra el Parlamento Europeo, la crítica constante contra la ONU.
A la invasión rusa a Ucrania, que rechazó condenarla y se declaró neutral, como ahora en el mayor ataque terrorista contra la población civil de Israel por parte del grupo Hamás, cuando ayer se declaró neutral, por lo que recibió un extrañamiento de su embajadora en México, Elnat Kranz Neiger, quien me dijo que le parecía un poco fuera de lugar al decir que no quería tomar partido, porque no hacerlo es tomarlo al lado del terrorismo, lo que por la noche ya formalizó en un comunicado oficial en el expresaba su inconformidad con esas declaraciones lamentando profundamente que López Obrador no hubiera adoptado una postura más enérgica y decidida.
Y es que en política internacional, como en la nacional, también tiene sus otros datos.
Pero no cabe duda que ese no es su mejor escenario y que la mejor política exterior no es siempre la mejor política interior.
O igual sí, por las reacciones.
RETALES
- COMPENSANDO.- López Obrador había cancelado su participación en la cumbre de la APEC, noviembre en San Francisco, pero cambió de opinión y será la primera vez que asista. Busca compensar su propia cumbre en Palenque con sus asociados ideológicos, los presidentes de Cuba, Venezuela, Honduras, Colombia, El Salvador, el día 22;
- DATOS.- La secretaria Luisa María Alcalde sostuvo ante los diputados que la política migratoria de la 4-T había reducido el número de migrantes y la intención de emigrar desde El Salvador y Honduras. Ayer la corrigió el presidente al revelar que entre agosto y septiembre la migración irregular creció 20 por ciento. ¿Entonces? Y
- PEMEX.- Octavio Romero, director de Pemex, dijo a los diputados que la empresa va en su mejor momento y desmintió que haya entregado petróleo a Cuba y que el Eximbank le haya cancelado, por eso, un crédito de 800 millones de dólares. Cada quien sus otros datos. Lástima que los diputados no le enfrentaron con información.
Nos vemos mañana, pero en privado.