Nuestros tiempos y nuestras pasiones

La Eurocopa ha simbolizado el regreso oficial de la afición a su máximo espectáculo, ese que estuvo guardado en el baúl de la melancolí

junio 24, 2021

Han sido días de un futbol espectacular, donde la comunión con la tribuna y el privilegio de volver a vivir ambiente en la grada más que nunca ha hecho valorar a todos lo que el futbol puede significar.

La Eurocopa ha simbolizado el regreso oficial de la afición a su máximo espectáculo, ese que estuvo guardado en el baúl de la melancolía, la que decía que no podíamos abrazarnos para festejar un gol.

Si de goles y festejos hablamos, solo la Eurocopa nos lleva ese clímax en este momento, no fue fácil, la primera fase nos volvió a mostrar la vulnerabilidad en la que vivimos, esa que siempre tendríamos que tener presente. Christian Eriksen fue ejemplo de la fragilidad humana, pero también, de la capacidad del entorno de hacer todo bien, para evitar una tragedia.

La realización de la primera fase en diferentes sedes nos ha entregado diferentes ambientes en la grada, esos que hoy sorprenden de más, quizá por la necesidad que teníamos de volver a la normalidad, en nuestro caso, aunque sea por televisión.

En el campo, hemos visto capacidad pura de Italia, Bélgica y Holanda, únicos equipos que marchan con paso perfecto. Cuando todos ya buscábamos entregar la copa a Francia, aparecieron estos tres equipos para levantar la mano, para recordarnos la esencia del juego mismo.

Es en el Grupo de Francia, en el llamado “Grupo de la Muerte” donde la fase se ha disfrazado de una pretemporada de primer nivel, ni Portugal, Francia y Alemania han salido bien librados del equipo más sorprendente del certamen, Hungría, sin pretender vivir del pasado, el equipo Magiar tuvo un dejavú dentro del terreno de juego y aunque en el juego ante Portugal terminaron siendo goleados, compitieron de tú a tú durante 80 minutos, como si se tratara de un homenaje a Puskas y Kocsis, arrebataron puntos a Francia y se quedaron a unos minutos de eliminar a Alemania, como si no hubiera otra manera de sobresalir, los alemanes siempre ante Hungría han vivido de milagros, ahora no fue en Berna, fue en Múnich y de nuevo a costa de los húngaros.

Así parece estar todo listo para la fase final de la Euro 2020, después de 13 días intensos con partidos a diario, el torneo llega a dos días de reflexión, donde el camino al título parece estar más competido que nunca, donde Cristiano Ronaldo sigue rompiendo récords en su quinta Copa de Europa, donde Benzema se ha reconciliado con el gol francés, donde el Inglaterra-Alemania en Wembley huele a “Gol Fantasma”, donde el futbol y su melancolía nos han llevado a una catarsis digna de NUESTROS TIEMPOS Y NUESTRAS PASIONES.