Minuto a Minuto

Internacional Perros robóticos con rostros de Musk, Bezos y Picasso acaparan la atención en Art Basel
El artista Beeple presentó en Art Basel Miami Beach perros robóticos con cabezas de figuras como Musk y Warhol en su instalación 'Regular Animals'
Internacional Andrea Bocelli da concierto en la Casa Blanca para Trump y sus aliados
Andrea Bocelli ofreció un concierto en el Salón Este de la Casa Blanca, donde Donald Trump lo presentó destacando su “voz de ángel”
Entretenimiento Manuel Serrat recibe un doctorado honoris causa que fortalece su “cadena de amor” por México
Joan Manuel Serrat recibió en Guadalajara el doctorado honoris causa de la UdeG como reconocimiento a su trayectoria, en el marco de la FIL
Internacional Mapa de Indiana aprobado favorece al partido de Trump de cara a los comicios 2026
La Cámara de Indiana aprobó un nuevo mapa que daría dos escaños más a los republicanos, pero el Senado estatal aún no lo ratifica
Nacional Fiscalías acuerdan trazabilidad de armas y mejora de datos sobre delitos
La Fiscalía General de la República realizó en la Ciudad de México la LIII Asamblea Plenaria de la Conferencia Nacional de Procuración de Justicia

La semana que empezó ayer puede marcar el sexenio. La decisión que tomará el Presidente electo sobre el aeropuerto definirá en gran medida su relación con los mercados y los inversionistas, y la de estos con la economía mexicana.

No es un asunto que le importe a la mayor parte de la población, pero es un asunto que le importa centralmente al dinero, no como el mayor negocio que puede hacerse en México, sino como síntoma de la actitud que se puede esperar del nuevo gobierno en materia de política económica y amistad o enemistad con la inversión.

Bien visto, me dice Leo Zuckermann, la confianza de los mercados y de los inversionistas es el único ingrediente que falta en la balanza para que López Obrador pueda hacer el gobierno memorable que quiere.

Imposible imaginar ese gobierno memorable sin un alto crecimiento económico, e imposible imaginar un alto crecimiento económico sin un alto flujo de inversión .

De modo que aunque el aeropuerto no es asunto que le importe a la mayor parte de la población, puede ser un mensaje decisivo para los mercados y los inversionistas respecto de si vale o no la pena meter dinero en México.

Muy mal empezará su gobierno López Obrador si cancela la inversión que tiene sobre la mesa. Se trata del aeropuerto pero podría ser cualquier otro proyecto.

Inaceptable para los mercados podría ser el espectáculo de un presidente cuyo primer acto de gobierno es patear una inversión de miles de millones de dólares tomando una pérdida de otros miles.

Otra cosa es que en el proyecto del aeropuerto haya corrupción, excesos, sobreprecios y contratos equívocos. El nuevo gobierno está a tiempo de corregir y hasta de sancionar los abusos que encuentre.

Limpiar eso, transparentarlo, reducir sus costos podría ser un primer ejemplo de anticorrupción y eficiencia .

Salirse del proyecto y licitarlo a privados sería otra opción aceptable. Cancelar el aeropuerto, no.

Sería , como dice Leo Zuckermann, desafiar la confianza del único ingrediente que le falta al nuevo gobierno para transformar el país: los inversionistas.

En esta materia, el aeropuerto puede costar un sexenio.