De otra manera, prevalecerán la impunidad y la corrupción, haciendo muy feliz al crimen organizado
ALEJANDRO GERTZ MANERO,
FISCAL GENERAL DE LA REPÚBLICA:
La impunidad induce a la repetición
del delito, estimula al delincuente
y contagia su ejemplo.
Eduardo Galeano
Que PEMEX ha sido mal manejado desde décadas atrás y por ello tiene pérdidas enormes, es de todos sabido, pero conviene señalar que el huachicol viene a echarle mucha sal a las heridas de PEMEX con algo así como 100 mil millones de pesos en pérdidas.
Como usted sabe, el huachicol tiene tres “presentaciones”. La tradicional, que supone extraer hidrocarburo de los ductos de PEMEX para robar gasolina o diésel para luego venderlo tanto a gasolineras como al menudeo.
La presentación 2.0 del huachicol consiste en extraer hidrocarburo de las líneas de PEMEX para exportarlo ilegalmente a EUA a fin de venderlo a pequeñas empresas refinadoras; o sea, estamos hablando de la internacionalización de esta mala práctica. Ayer nos fuimos a dormir con la noticia de que las autoridades federales de seguridad aseguraron millón y medio de litros de petróleo crudo, en Comalcalco, Tabasco. No es el único golpe al huachicol, pues en las últimas semanas se decomisaron 7.9 millones de hidrocarburo en Ensenada, BC; otros 500 mil fueron decomisados en Ciudad Juárez, Chihuahua; y dos mil quinientos en Palmar de Bravo, Puebla.
¿Acaso las autoridades de pronto se volvieron super inteligentes para detectar estas acciones ilegales? ¿Qué desayunarán? Porque lo que es que la administración pasada no se cansaba de decir que el huachicol se había acabado…
Seguramente usted se enteró, doctor Gertz, de que la empresa Arroyo Terminals, ubicada en Texas, supuestamente recibía aceite de desecho para procesar; pues no, lo que llegaba a sus instalaciones era petróleo crudo mexicano en cantidades considerables. El caso es que a la División de Investigación Criminal del Servicio de Impuestos Internos de EUA no le cuadró la contabilidad de Arroyo Terminals y le cayó en la maroma; los dueños ya están siendo enjuiciados y la Agencia contra el Delito Financiero de EUA ya investiga a otras empresas posiblemente involucradas.
El esquema estaba más que armado y, como es de suponer, implicaba una logística de corrupción impecable, pasando por elaborar declaraciones aduanales falsas, tener un exportador desde México, sobornar a las autoridades aduanales, empresas fachada, etc., etc. Sólo que de este lado de la frontera no sabemos nada sobre quienes estaban involucrados.
Reportes periodísticos como el de El Universal (5/5/2025) hablan de un destacado malandro, perteneciente al Cártel Jalisco Nueva Generación, pero de las contrapartes corrompidas, ni la Fiscalía a su cargo ni la Secretaría de Buen Gobierno han dicho algo. Por cierto, el Departamento del Tesoro identificó a dos empresas mexicanas por presuntos vínculos con el esquema de Arroyo: Servicios Logísticos Ambientales, S.A., y Grupo Jala Logística, S.A. de C.V., ambas con base en Tamaulipas. ¿Qué nos platica sobre ellas?
Ahora pasemos a la presentación 3.0 que es el huachicol fiscal, el cual consiste en importar ilegalmente gasolina proveniente de refinerías estadounidenses; el truco está en que los importadores declaran que se trata de residuos de aceite y, por lo tanto, no están obligados a pagar el IEPS.
Muy sonado fue el caso del buque cisterna Challenge Procyon, el cual supuestamente traía aditivos con destino a Tampico, Tamaulipas, pero las autoridades de seguridad se encontraron con que se trataba de diésel por el equivalente a 10 millones de litros. El caso levantó tanta ámpula que tres funcionarios de la Administración del Sistema Portuario Nacional fueron cesados.
Sin embargo, el caso tiene muchos “asegunes”, tal como lo revela la investigación documental y de campo de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad.
Primero, que uno de los funcionarios, Francisco Javier Antonio Martínez, ha “mejorado” su nivel de vida de manera tan sorprendente como inexplicable; ¿será acaso porque mantiene una sociedad con la empresa importadora, Intaza? Han pasado dos meses y no se sabe nada de lo que haya hecho FGR con la denuncia hecha por la Secretaría de Marina.
Segundo, que la empresa importadora está apelando la confiscación por el equivalente a 20 millones de litros, lo cual lleva a preguntar por qué solo se reportó la incautación de la mitad. Nadie puede aclarar dónde quedaron los 10 millones de litros. La Secretaría de Marina ya dejó claro que corresponde (¿?) a la FGR determinar cuál fue la cantidad incautada, lo cual como que no cuadra si fue dicha Secretaría la que encabezó el operativo. Y la Fiscalía no se ha expresado al respecto.
El tercer “asegún” es la empresa importadora, Intaza. Según constató MCCI, la firma tiene su domicilio en una zona de residencias estudiantiles en Monterrey. Y no le platico la cantidad de importaciones que ha realizado: 19 millones de litros en 2023; 8.6 millones de litros en 2024; y 46 millones en dos operaciones en febrero de este año. No anda nada mal su negocio…
Lo que se deja ver, don Alejandro, es que las autoridades de seguridad están haciendo su chamba de combate al huachicol, pero luego quedan mucho cabos sueltos que la Fiscalía a su cargo debiera recuperar. De otra manera, prevalecerán la impunidad y la corrupción, haciendo muy feliz al crimen organizado.
Con la colaboración de Upa Ruiz
Nueva cuenta en X: @ruiz_upa
X: @Lmendivil2015