Hasta el momento se tienen registrados 68 casos de meningitis debido a un hongo y la enfermedad no se transmite de persona a persona
Un brote de meningitis que ha provocado 18 defunciones en el estado de Durango se originó por anestesia contaminada, confirmó el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud de México, Hugo López-Gatell.
En conferencia de prensa, informó que hasta el momento se tienen registrados 68 casos de meningitis debido a un hongo y precisó que la enfermedad no se transmite de persona a persona.
“Lo hemos caracterizado como una situación compleja en términos de salud porque se trata de un brote de meningitis, ya no le llamamos aséptica, porque a lo largo de la investigación ya encontramos la causa, el agente infeccioso y lo que encontramos fue un hongo microscópico”, explicó López-Gatell a medios.
Agregó que el hongo tiene por nombre Fusarium solani “que es la presunta causa de esta meningitis”.
Según los apuntes médicos, la meningitis consiste en la inflamación de las membranas (meninges) que rodean al cerebro y la médula espinal. Habitualmente, aunque no siempre, tienen una causa infecciosa como bacterias, parásitos, hongos, virus, ciertos medicamentos o tumores.
López-Gatell precisó que “no se trata de una enfermedad que va a ser transmitida de persona a persona” y dijo que esto es importante para que no se genere “una inquietud, no justificada de que pudiera ser un brote que se propague porque no es la manera en que se contagia esta meningitis en particular”.
Dijo que las investigaciones científicas en la parte epidemiológico-sanitaria y la investigación que por su cuenta ha hecho la Fiscalía del Estado de Durango tienen conclusiones comunes.
“La presunta causa de infección de las pacientes fue a través de un procedimiento de anestesia estandarizado que en condiciones habituales es completamente seguro”, precisó.
Añadió que la investigación está orientada a encontrar cuales “fueron los errores de práctica que llevaron a que un procedimiento seguro, se volviera inseguro en el caso de las pacientes afectadas”.
El 24 de noviembre, la Secretaría de Salud de México indicó en un comunicado que la investigación estaba enfocada en determinar en qué punto del proceso ocurrió la contaminación y dijo que “sería especulativo atribuir los casos a los frascos fabricados, almacenados o al uso mismo del anestésico en los pacientes”.
En ese reporte se informó que se llevaba a cabo el seguimiento médico de las personas que desde mayo recibieron el procedimiento anestésico en alguno de los cuatro hospitales involucrados para monitorear su estado de salud.
Además, se apuntó que el gobernador de Durango, Esteban Alejandro Villegas, México había realizado consultas con expertos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) y de la Administración Federal de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos.
Ese mismo día, la Dirección General de Epidemiología informó que la mayoría de las afectadas eran mujeres con procedimientos quirúrgicos obstétricos y un varón con antecedente de intervención ortopédica. En todos los casos en protocolo recibieron bloqueo neuroaxial, precisó.
Con información de EFE