“La lesión fue ocasionada por la falta del instrumental médico adecuado”, indicó la CNDH en su recomendación 30/2018
La Comisión Nacional de Derechos Humanos pidió al director del IMSS, Tuffic Miguel, reparar el daño infringido a una recién nacida, a quien amputaron el brazo izquierdo por una negligencia médica.
Fue en el Hospital General de Zona 42, ubicado en Puerto Vallarta, Jalisco, donde por acciones y omisiones de los médicos y enfermeros una infección en la mano de la bebé evolucionó hasta tornarse grave.
“Cabe destacar que la lesión fue ocasionada por la falta del instrumental médico adecuado”, indicó la CNDH en su recomendación 30/2018.
La niña, nacida vía cesárea, se quedó hospitalizada por problemas para respirar, pero durante su estancia, la mamá le notó un punto negro con rojo en la mano, indicándole la pediatra que se le había infiltrado un catéter, pero que se le quitaría con óxido de zinc, el cual no le proporcionaron.
El personal médico indicó después que la bebé tenía las plaquetas bajas, por lo que le administrarían antibióticos. Fue así que la lesión creció.
De esta forma, solicitó que se repare integralmente el daño a la menor y sus padres, inscribirlos en el Registro Nacional de Víctimas y crear un fideicomiso que le víctima cuente con recursos para su rehabilitación.