La violencia en la sierra de Guerrero se ha recrudecido en el poblado de Polixtepec en el municipio de Leonardo Bravo
Una familia fue ejecutada por un comando armado que arribó hasta su vivienda, donde además de matarlos incendiaron tres viviendas aledañas.
El hecho ocurrió en la comunidad de Polixtepec en la sierra guerrerense, la localidad se ubica en el municipio de Leonardo Bravo, en Guerrero.
El hallazgo fue hecho por elementos del Ejército Mexicano quienes realizan patrullajes en las zonas más alejadas de las cabeceras municipales. Al llegar a los domicilios, hallaron los cuerpos calcinados y con rastros de balazos.
En una de las viviendas que estaba entreabierta los militares hallaron los cuerpos de dos hombres jóvenes y una mujer además de otra mujer de edad adulta, asimismo dos hombres fueron ‘levantados’ por el comando.
Vecinos de la comunidad señalaron que la noche del lunes escucharon detonaciones de arma de fuego y que no acudieron a saber que sucedía por miedo, sin embargo declararon a las autoridades que el comando armado que llegó para matar a la familia arribó en varias camionetas e iban fuertemente armados.
Se señala que al arribo del comando se pudieron contabilizar al menos diez camionetas, de donde descendieron cerca de cuarenta personas armadas principalmente con fisiles Ak-47 y AR-15.
El agente del Ministerio Público especializado en homicidios acudió para realizar el levantamiento de pruebas, posteriormente solicitó el traslado de los cuerpos a la sede del Semefo local. En el domicilió se encontraron cerca de cien casquillos de diversos calibres, como de Cuerno de Chivo y AR-15, calibre 50, calibre .380 y calibre 9 milímetros.
Los hombres que fueron levantados fueron identificados como Héctor “N” de 50 años y Norberto “N” de 27 años, mientras que las personas que fueron acribilladas se informó que eran Cristina “N” de aproximados 50 años, Gloria “N” de 23 años, Adán “N” de 18 e Isaél de 16 años de edad.
Tras el incidente la telesecundaria, la primaria, el jardín de niños y la casa de salud se encuentran cerradas debido a que los médicos y maestros se niegan a ir a trabajar por la inseguridad de la zona y por la falta de elementos policiacos en la zona, quienes únicamente pudieron ser vistos en Polixtepec luego del atentado contra la familia.
El poblado de Polixtepec contaba con trecientos habitantes, mismos que han huido o han sido víctima de la violencia que impera en la zona, la cual se encuentra en disputa entre dos grupos criminales.
Tras el ataque a la familia, la violencia continúo ya que en el transcurso de la tarde de ayer una persona más fue ejecutada y la central de abastos y un sitio de taxis fueron atacados, lesionando por arma de fuego a cuatro personas, además de que vecinos de la zona encontraron una fosa clandestina con los restos de un hombre y una mujer.
Con información de Sur Acapulco