Un inédito recuento de la totalidad de los votos para el Senado de Colombia toma fuerza como medida para superar la crisis de confianza
Un inédito recuento de la totalidad de los votos depositados para el Senado el pasado 13 de marzo toma fuerza como medida para superar la crisis de confianza en la organización electoral de Colombia tras las denuncias de diversos partidos sobre sufragios no contabilizados.
La petición en ese sentido la hará este martes al Consejo Nacional Electoral (CNE) de Colombia el registrador nacional, Alexander Vega, quien está en el ojo del huracán por lo ocurrido y cuya renuncia es pedida por políticos de diversas orillas ideológicas que no ven en su gestión garantías para las elecciones presidenciales del próximo 29 de mayo.
Como registrador general solicitaré el día de mañana nuevamente el recuento de todas las mesas de Senado (…) con el fin de salvaguardar la institucionalidad”, expresó Vega en una conferencia de prensa sobre esa inédita petición, motivada por las dudas sobre la transparencia de la Registraduría Nacional, entidad organizadora de los comicios.
La controversia comenzó al día siguiente de las elecciones cuando la coalición izquierdista Pacto Histórico, liderada por el candidato presidencial Gustavo Petro, denunció que no le habían contado cerca de 500 mil votos al Senado.
El escrutinio del 97 por ciento, publicado el viernes por la Registraduría, le adjudicó 390 mil 152 votos más de los dos millones 302 mil 847 que habían sido informados en el conteo preliminar, con lo que llegó a dos millones 692 mil 999 sufragios y se convirtió en el movimiento con la mayor diferencia entre los dos datos.
Las proyecciones muestran que con este resultado el Pacto Histórico puede obtener 19 escaños en la Cámara Alta, tres más que los obtenidos en el conteo preliminar, al tiempo que le restarían un puesto al Partido Conservador, que quedaría con 15, y al oficialista Centro Democrático y a la Coalición Alianza Verde-Centro Esperanza, que bajarían a 13 cada uno.
Ante esto, el Centro Democrático, partido de Gobierno fundado por el expresidente Álvaro Uribe, dejó caer la sospecha de que puede haber papeletas alteradas por los jurados de las mesas, lo que, sumado a las protestas de la izquierda, ha puesto en tela de juicio el trabajo de la Registraduría.
Esa situación creó un consenso entre los partidos de todos los colores: es necesario el recuento propuesto hoy por Vega y que se espera que el CNE apruebe mañana.
El presidente de Colombia, Iván Duque, convocó para mañana una reunión de la Mesa de Garantías Electorales para que las autoridades “puedan esclarecer todas las dudas que existen frente a esos lugares de votación relacionados con la elección de Senado, que han generado controversia”.
Apoyo al recuento en Colombia
El senador electo Roy Barreras, vocero del Pacto Histórico, destacó la decisión de solicitar un recuento y dijo que esa coalición fue la primera en “pedir el recuento general” porque es allí donde “están los votos”.
Si van a recontar, bienvenido el reconteo general pero sin alterar el calendario electoral y sin creer que con eso van a dejar de proclamar el triunfo del Pacto y de nuestras mayorías, que son evidentes”, expresó Barreras en un video, en el que estimó que su coalición podría incluso llegar a 25 senadores en el recuento.
Por su parte, Miguel Uribe Turbay, senador electo del Centro Democrático y quien obtuvo la votación más alta del país en las elecciones del 13 de marzo, considera que el recuento es necesario para “garantizar la confianza absoluta de estas elecciones” y que “estas irregularidades no vuelvan a suceder de cara a la elección presidencial”.
La sombra de las elecciones de 1970
Lo ocurrido con el conteo de los votos al Senado trajo a la memoria un hecho ocurrido hace 52 años, cuando una maniobra del Gobierno en las elecciones presidenciales de 1970 le dio el triunfo al conservador Misael Pastrana por delante del general retirado Gustavo Rojas Pinilla, que había liderado el conteo de votos.
El alegado fraude en esas elecciones dio origen años después a la guerrilla Movimiento 19 de Abril (M-19), que tomó su nombre de la fecha en que se celebraron dichos comicios y en la cual militó Petro.
El senador electo Humberto de la Calle, uno de los líderes de la coalición Centro Esperanza y exjefe negociador de paz del Gobierno con las FARC, se sumó a las voces a favor del recuento porque considera que Colombia no puede “repetir el estigma del 19 de abril”.
“Que brille la verdad impecable. Recuento con auditoría insospechable. Es la manera de defender la democracia genuina”, añadió De la Calle en Twitter.
No hay democracia sin verdad electoral pic.twitter.com/Nb4ARIJZja
— Humberto de la Calle (@DeLaCalleHum) March 21, 2022
En medio de la confusión reinante, los expresidentes Andrés Pastrana (1998-2002) y Álvaro Uribe (2002-2010) han sembrado un discurso de supuesto fraude “a favor del Pacto (Histórico)” por el cual, eventualmente, no reconocerían las elecciones.
Ante esto, De la Calle escribió: “Frente a la irresponsabilidad de dos expresidentes de desconocer las elecciones, lo recomendable es hacer el recuento total auditado. No podemos llegar a la elección presidencial con el estigma de la sospecha”.
Pese a que las mayores discrepancias se han dado con la votación para el Senado, también las hay con la de la Cámara de Representantes, cuyo escrutinio la Registraduría espera publicar mañana.
No obstante, Vega no ha hecho solicitudes de recuento de los votos de la Cámara ni de las consultas interpartidistas, de las que resultaron ganadores Petro, por el Pacto Histórico; Federico Gutiérrez, por el derechista Equipo por Colombia, y Sergio Fajardo, por la Coalición Centro Esperanza.
Con información de EFE