
Hasta antes de que las llamas destruyeran una importante cantidad de acervo, contaba con más de 20 millones de piezas
El Museo Nacional de Río de Janeiro, consumido el domingo por un incendio, es el más grande de América Latina en lo que a recintos de historia natural se refiere.
Hasta antes de que las llamas destruyeran una importante cantidad de acervo, contaba con más de 20 millones de piezas y una biblioteca de más de 530 mil títulos.

Fue creado en 1818 por el rey Juan VI en lo que era la residencia de la familia real portuguesa y brasileña, el Palacio de San Cristóbal.
De sus 11 mil 400 m2, tres mil 500 m2 se destinan a salas de exposiciones y 40 hectáreas a un jardín botánico.

Entre sus posesiones más valiosas están más de 26 mil fósiles, entre ellos un esqueleto de dinosaurio descubierto en Minais Gerais, así como “Luzia”, el más antiguo fósil humano descubierto en Brasil.
En su área de Zoología, cuenta con una colección de 600 mil peces, 100 mil anfibios, moluscos, reptiles, conchas, corales y mariposas.
Antes del gran incendio de este domingo, el Museo Nacional de Río sufrió daños por tormentas que disolvieron parte de un esqueleto de tiranosaurio.
Con información de AFP