Vitaly Churkin, embajador de Rusia ante las Naciones Unidas, perdió la vida este lunes a los 64 años de edad
El embajador de Rusia ante Naciones Unidas murió el lunes de súbito después de sentirse mal en su oficina.
Vitaly Churkin, de 64 años, fue trasladado a un hospital en Nueva York, donde perdió la vida, dijo el embajador adjunto de Rusia en Naciones Unidas, Vladimir Safronkov. Se cree que lo que provocó el deceso del embajador fue un ataque al corazón.
Churkin era el representante de Rusia en Naciones Unidas desde 2006 y se le consideraba el gran defensor de Moscú en el organismo mundial.
Diplomáticos de diversos países lamentaron la muerte de Churkin, al que describieron como una voz poderosa y apasionada que representó a su nación con un profundo conocimiento de la diplomacia y una personalidad grande y pintoresca.
Churkin hizo escuchar los puntos de vista de Rusia en el conflicto en Siria y enfrentó a diplomáticos de Estados Unidos y otros países occidentales en torno a imponer sanciones o adoptar medidas para la finalización del conflicto.
El presidente Vladimir Putin elogió el profesionalismo y la diplomacia de Churkin.
“Causó tristeza al presidente enterarse de la muerte de Vitaly Churkin”, dijo el portavoz Dmitry Peskov.
El ministerio del exterior de Rusia describió a Churkin como un diplomático “notable” y transmitió sus condolencias a la familia y amigos del diplomático.
La portavoz Maria Zakharova dijo en un mensaje que Churkin era “una persona extraordinaria. Un hombre brillante. Hemos perdido a un ser querido”.
Redacción