Se contabilizaron 58 muertos y 887 heridos, sin que hasta el momento se conozcan los motivos que tuvo Paddock para matar a tantas personas
Este lunes se cumple un año de la masacre que Stephen Paddock perpetró en un concierto de Las Vegas, Estados Unidos.
Más de 20 mil personas disfrutaban de la música cuando el hombre de 64 años disparó a la multitud desde el piso 32 del Hotel Mandala Bay, con vista al escenario.
Cifras oficiales contabilizaron 58 muertos y 887 heridos, sin que hasta el momento se conozcan los motivos que tuvo Paddock para matar a tantas personas y luego suicidarse.
La Policía del condado de Clark, donde ocurrieron los hechos, detalló que el tirador era un hombre “común y corriente” que si bien había mostrado señales de tener una mente con problemas, nunca tuvo comportamientos alarmantes.
Además de alojarse en el Mandala Bay, Stephen reservó habitaciones en Chicago para el festival Lollapalooza y en Las Vegas para el Life is Beautiful, presumiéndose que pudo querer desatar tiroteos allí también.
Se supo que Paddock compró legalmente 55 armas entre octubre de 2016 y septiembre de 2017, de entre las cuales, modificó 12 rifles semiautomáticos con dispositivos en las culatas para disparar a una mayor velocidad.
Entre nueve y once minutos duró el tiroteo del hombre, cuyo historial financiero fue lo que más llamó de las autoridades, ya que de ser acaudalado, pasó a saldar deudas en casinos y bancos.
Aunque el Estado Islámico se reivindicó el ataque, las autoridades concluyeron que Stephen Paddock actuó solo.
Con información de EFE