La decisión de Corea del Norte de abandonar la sesión se dió luego de que Pence denunciara las ambiciones del régimen en Asia
El vicepresidente Mike Pence salió para un viaje de cinco días por dos países asiáticos a principios de este febrero y acordó una reunión secreta con funcionarios de Corea del Norte, mientras se encontraba en los Juegos Olímpicos de Invierno de 2018 en PyeongChang.
No obstante, de acuerdo con reportes, el sábado 10 de febrero a menos de dos horas de que Pence y su equipo se reunieran con Kim Yo Jong, la hermana menor del líder Kim Jong Un, y Kim Yong Nam, jefe de estado nominal, los norcoreanos se retiraron; de acuerdo con la oficina del vicepresidente.
La decisión de Corea del Norte de irse de la junta programada se produce después de que el funcionario estadounidense durante su viaje denunció las ambiciones nucleares del régimen y anunciar las sanciones “más duras y más agresivas” contra éste, mientras se toman medidas para solidificar aún más la alianza de Estados Unidos con Japón y Corea del Sur.
El hecho también se registró luego de que Kim Jong Un, a través de su hermana, invitara al presidente surcoreano Moon Jae-in a Pyongyang para iniciar “pronto” con las conversaciones.
A esto, el mandatario del sur dijo por medio de un portavoz que trataría de hacerlo realidad.
Dicho acontecimiento provocaría en Washington consternación, con la administración de Trump liderando una campaña para poner “presión máxima” sobre Corea del Norte para que renuncie a su programa nuclear.
Las acciones y la retórica de Pence en el camino hacia los Juegos Olímpicos contrastaron con la imagen del progreso promovido por los surcoreanos.
Con información de The Washington Post