Un hombre armado intentó hacerse pasar como miembro de la Guardia Nacional, desplegada en Los Ángeles ante las protestas por brutalidad policial
El Departamento de Policía de Los Ángeles detuvo, la madrugada del martes, a un hombre armado que intentó hacerse pasar por efectivo de la Guardia Nacional, desplegada en Los Ángeles para hacer frente a las protestas contra la brutalidad policial, informaron este miércoles medios locales.
Gregory Wong, de 31 años, fue arrestado cerca de la alcaldía de la ciudad después de que miembros de la Guardia Nacional lo confrontaran al darse cuenta de que su vestimenta militar y su equipamiento no eran auténticos, de acuerdo al diario Los Angeles Times.
El rotativo angelino explicó que Wong, quien portaba dos armas, una de ellas un fusil de asalto sin número de serie, e iba equipado con uniforme militar de fatiga, fue miembro de la Guardia Nacional en el pasado, aunque ahora no forma parte de ese cuerpo de reserva de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos bajo control de los estados.
Otros medios destacaron que el joven, de origen asiático, ha publicado videos sobre armas y tácticas militares en redes sociales como YouTube.
Tras el arresto, Wong se encuentra bajo custodia policial y se le ha fijado una fianza de 50 mil dólares.
Unos 4 mil 500 soldados de la Guardia Nacional han sido desplegados en California durante la ola de protestas por la violencia policial contra las minorías, tras el asesinato del afroamericano George Floyd el pasado 25 de mayo a manos de la Policía de Minneapolis.
En el quinto día consecutivo con toque de queda y una semana después de que comenzara la ola de protestas en Estados Unidos, se esperan manifestaciones pacíficas en el distrito de West Hollywood y en el centro de la ciudad.
Esas zonas fueron este martes el escenario de largas marchas que llegaron también a la residencia del alcalde de la ciudad, Eric Garcetti, quien durante la mañana se arrodilló junto a otros policías frente al Ayuntamiento en solidaridad con la causa de los manifestantes, entre aplausos y gritos.
Con información de EFE