El presidente de los Estados Unidos manifestó su intención de armar con material militar sofisticado a sus principales aliados en la región
El domingo, observatorios sismológicos de todo el mundo registraron un temblor subterráneo de magnitud 6 y con el epicentro en las montañas Kilju, en Corea del Norte.
Investigadores noruegos y japoneses, señalaron que se trataba de una detonación nuclear y que su escala era muy superior a la de las otras pruebas nucleares que el régimen comunista ha realizado en los últimos 10 años.
Para que no quedará ninguna duda, el gobierno de Kim Jong Un emitió un comunicado jactándose de haber detonado con éxito una bomba de hidrógeno.
El magnate una vez más acudió a Twitter para anunciar una nueva acción con respecto a la península coreana: “Estoy permitiendo que Japón y Corea del Sur compren una cantidad substancialmente mayor de equipo militar altamente sofisticado a los Estados Unidos”.
El tuit del presidente de Estados Unidos puede ser visto como otra amenaza a Corea del Norte, ya que ambos países son los principales aliados de la Unión Americana en la región.
Rusia ha criticado las reacciones que ha tenido EE.UU. con Corea del Norte y advirtió que “un paso en falso podría ser muy peligroso.
El viceministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Ryabkov, en la cumbre del grupo BRICS en China, dijo que “está claro que en la situación actual cualquier paso en falso podría llevar a una explosión, una explosión política, una explosión militar y no solo a una explosión nuclear”.
Redacción