Una de las dos cajas negras que rescataron de la profundidad del mar demostró que sí se registró humo negro antes de estrellarse
La grabación de una caja negra del vuelo MS804 de EgyptAir, que partió de París rumbo a El Cairo y se sumergió en el mar Mediterráneo el 19 de mayo, matando a las 66 personas a bordo, confirmó que sí hubo humo a bordo del avión, según los investigadores egipcios.
Los mensajes electrónicos automatizados enviados por el avión, habían demostrado que los detectores de humo se activaron en un inodoro y en la zona de debajo de la cabina del piloto, minutos antes de que el avión se estrellara.
Dichos datos registrados son consistentes con los mensajes de la caja negra, dijeron los investigadores.
Las dos grabadoras de voz y datos de vuelo, conocidas como cajas negras, se recuperaron de una profundidad de unos 3 mil metros (9,800ft) en el Mediterráneo.
La segunda grabación de las cajas negras, todavía está siendo reparada en París.
El comité de investigación egipcia también dijo que parte de la sección frontal de los restos de la aeronave “mostró signos de daño a alta temperatura” y hollín.
No se hizo ninguna llamada de socorro desde el avión antes del accidente. La causa sigue siendo desconocida.
El Airbus 320 de EgyptAir, que cubría la ruta de París a El Cairo, llevaba 56 pasajeros y 10 tripulantes, se estrelló en el Mar Mediterráneo, ya en el espacio aéreo egipcio.
El avión partió del aeropuerto Charles de Gaulle de París el pasado miércoles por la noche, para estrellarse a las 2:45 h del jueves (19:45 h tiempo del centro de México).
La mayoría de los pasajeros eran egipcios (30) seguido de franceses (15) e iraquíes (2).
Entre los tripulantes también había un británico, belga, kuwaití, saudita, sudanés, chadiano, portugués, argelino y un canadiense.
Con información de BBC