El hombre aprovechó la situación tras el estallido de una bomba en la Manchester Arena para robar a las víctimas
Un juez británico dictó sentencia este martes contra un hombre sin hogar que admitió haber robado a las víctimas del ataque terrorista de la Arena de Manchester mientras pretendía ayudarles.
Chris Parker, de 33 años, recibió el reconocimiento de todo el mundo cuando dijo que ayudó a consolar a las personas que resultaron heridas o muertas después del ataque suicida al final del concierto de Ariana Grande en el que 22 personas murieron en el ataque de mayo pasado.
Sin embargo, el circuito cerrado de seguridad mostró imágenes de Parker robando un bolso y un teléfono celular de una de las víctimas por lo que su status de héroe acabó.
Él admitió los cargos de robo y fraude.
Antes de la aparición de la filmación, se llevó a cabo una colecta de unos 70 mil dólares para apoyar al hombre pero se ha revelado que el dinero será devuelto.
Así, Parker fue sentenciado a una pena de cuatro años y tres meses de prisión debido a lo que el juez consideró “un conjunto reprobable de circunstancias”.
El fiscal dio a conocer un informe en el que reveló que el hombre robó el teléfono de una menor de 14 años, la cual se molestó pues no podía avisar a su familia y sus amigos cómo estaba después del estallido de la bomba.
Parker también robó el bolso de Pauline Healey, que se encontraba en la Arena junto con su hija y su nieta de 14 años y usó la tarjeta de débito de Healey para comprar comida en McDonalds. La nieta de Healey murió en el ataque.
Los fiscales reconocieron que Parker había actuado con dolo al tratar de sacar provecho de la situación en el momento del estallido de la bomba.
Con información de AP
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