Jair Bolsonaro, candidato de ultraderecha, es líder en las encuestas para la primera vuelta del 7 de octubre
El candidato de ultraderecha Jair Bolsonaro permanece este viernes en un hospital de Minas Gerais, al día siguiente de haber recibido una puñalada que pudo costarle la vida pero que podría acercarlo a la presidencia de Brasil.
“Un mensaje para esos bandidos (…): acaban de elegir al nuevo presidente y será en la primera vuelta”, declaró uno de sus hijos, Flávio Bolsonaro, tras visitar poco después de medianoche a su padre en la Santa Casa de Misericordia de Juiz de Fora.
Bolsonaro, líder en las encuestas para la primera vuelta del 7 de octubre, fue ingresado el jueves con un cuadro vital comprometido: hemorragia interna, tres perforaciones en el intestino delgado, una lesión grave en el intestino grueso y otra en una vena del abdomen.
Tras ser intervenido, su estado era “estable por el momento”, indicó el último parte médico.
El excapitán del Ejército y diputado, de 63 años, fue atacado cuando sus seguidores lo llevaban en andas durante una caminata de campaña.
El presunto autor, detenido rápidamente, fue identificado como Adélio Bispo de Oliveira, un exmilitante del partido de izquierda PSOL, que explicó a la policía haber actuado en cumplimiento de “una misión divina, una misión de Dios”.
En un impresionante video filmado y difundido por un senador aliado inmediatamente después de la operación, Bolsonaro cuenta la manera en que vivió el atentado, agradece a Dios y a sus médicos y lamenta no poder asistir al desfile militar que este viernes se llevará a cabo en Rio de Janeiro por el Día de la Independencia.
“Pero estaremos con el corazón y la mente, teniendo siempre a Brasil encima de todos y a Dios encima de todos”, afirma, usando la consigna de su campaña electoral.
El candidato presidencial fue trasladado este viernes desde Juiz de Fora a Sao Paulo, informó una portavoz del hospital de esa localidad de Minas Gerais.