La mayoría de las bandas criminales están dedicadas a la venta y distribución de droga, aunque se ha extendido el robo de hidrocarburo y extorsión
El Estado de México es disputado por más de 13 bandas criminales, en su mayoría dedicadas a la venta y distribución de droga.
De acuerdo con la última actualización del mapa geodelictivo de la Fiscalía General de Justicia local, los cárteles de droga asentados en el estado provienen de distintas partes del país.
Asimismo, se han extendido los grupos dedicados al robo de hidrocarburos y a la extorsión, teniendo presencia en total en alrededor de 20 municipios.
En Tejupilco, Tlatlaya, Amatepec, Sultepec, Temascaltepec, Ixtapan de la Sal, Valle de Bravo y una parte de Toluca, se registran operaciones de La Familia Michoacana, Los Rojos y Guerreros Unidos.
Al norte, El Grupo, desprendido de La Nuevo Familia Michoacana, ha tomado control en Acambay, Atlacomulco, Jocotitlán y San Felipe del Progreso, siendo su principal actividad el robo de combustible.
El Cártel Jalisco Nueva Generación se ha hecho de Tlalnepantla, Cuautitlán Izcalli, Tultitlán, Nextlalpan, Zumpango, Huehuetoca, Tecámac y San Martín de las Pirámides.
El Cártel Nuevo Imperio se asentó en Huixquilucan, Naucalpan, Cuautitlán Izcalli, Atizapán de Zaragoza, Tlalnepantla, Tultitlán y Nicolás Romero.
Las bandas El Sapo, de El Monterrey y MBL se ubican al noreste del Estado de México incurriendo en extorsión de empresarios y transportistas. Finalmente, al oriente están el Cártel del Sur, La Unión Tepito, Cártel de Tláhuac, la banda de Los Mazos y La FM.
Con información de Quadratín