La distancia que separa a los aviones es de solo 6 metros, y el piloto debe emparejarlos con un joystick hasta que logran embonar
En operaciones militares, llega a darse el caso donde los aviones se encuentren lejos de su base o se estén quedando sin combustible, así que otros aviones tienen que abastecerlos, y aunque es clasificado como una operación de rutina, el proceso no deja de ser impresionante.
Las nuevas imágenes sobre el procedimiento forman parte de uno de los ‘juegos de guerra’ más realistas del mundo: “Red Flag”. En ellas, se puede ver como un KC-135 Stratotanker despega con casi 56 mil 700 kilos de combustible, el doble de lo que necesita un Boeing 747.
Tras 40 minutos de vuelo, los pilotos se posiciona en una ruta determinada de reabastecimiento a 8 mil 500 kilómetros sobre el desierto de Nevada, colocándose en una ruta de forma ovalada a la espera de los Raptors F-22, quienes buscarán abastecer su tanque.
Para eso, uno de los pilotos se coloca boca abajo sobre un espacio reducido y toma joystick, con el cual maniobra la bomba de 6 metros con la cual se realizará la recarga.
El Raptor F-22 aparece de la nada y se acerca poco a poco al Stratotanker, y ambos comienzan a maniobrar lentamente para terminar de embonar, quedando muy cerca de chocar.
Al terminar el ejercicio el KC-135 Stratotanker habrá recargado el combustible de 12 aviones en 4 horas, una cifra considerada alta para esos ejercicios.
“Es cansado, es trabajo duro, y tras cada vuelo que hemos hecho he tenido las mejores vistas del mundo; amo cada día de esto”, dijo el operador, el sargento técnico Jeremy Pratt.
No es el mismo vuelo, pero aquí una demostración.
Con información de USA Today